Fraude millonario en Las Cañitas: conexiones clandestinas en departamentos de lujo

La empresa Edenor llevó a cabo operativos de control en el barrio porteño de Las Cañitas y detectó irregularidades en las conexiones eléctricas de 20 departamentos de un edificio premium. Según informó la compañía, las instalaciones fueron modificadas para evitar que los medidores registraran el consumo real de energía.

Modus operandi

Los inspectores de Edenor descubrieron que las conexiones clandestinas habían sido realizadas en la sala de medidores del edificio. Las modificaciones permitieron que los medidores no reflejaran la cantidad de energía utilizada, lo que derivó en un consumo irregular de electricidad.

Airbnb y turismo

Lo llamativo del caso es que algunos de los departamentos implicados se ofrecían en alquiler temporal a turistas a través de plataformas como Airbnb. Esto significa que los inquilinos estaban consumiendo energía de manera ilegal, lo que representa un riesgo para su seguridad y para la infraestructura eléctrica del edificio.

Acción legal

Ante el hallazgo, Edenor retiró las conexiones clandestinas con presencia policial. La causa quedó radicada en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 6, que inició una investigación para determinar las responsabilidades penales correspondientes.

Intimación a los propietarios

Además de la acción legal, Edenor intimó a los propietarios de los departamentos a pagar la energía consumida de manera irregular. El monto total asciende a $7,3 millones, que incluye penalidades por los 30.132 kWh no registrados.

Riesgos y consecuencias

Edenor advirtió que este tipo de conexiones ilegales no solo constituyen un robo de energía, sino que también representan un grave riesgo de electrocución para quienes las manipulan. Además, aumentan las posibilidades de cortocircuitos e incendios, poniendo en peligro la seguridad de los ocupantes del edificio y de los vecinos.

Medidas de Edenor

La empresa recordó que está facultada para cobrar el consumo no registrado con hasta cuatro años de retroactividad, aplicando recargos del 40%, multas y punitorios adicionales. Edenor realiza controles periódicos para verificar el estado de las conexiones eléctricas en los domicilios y detectar irregularidades como las que se encontraron en Las Cañitas.

"Estas conexiones ilegales no solo constituyen un robo, sino que representan un grave riesgo de electrocución para quienes las manipulan, además de aumentar las posibilidades de cortocircuitos e incendios", advirtieron desde Edenor.