El Gobierno argentino anunció una serie de medidas para simplificar los trámites de obtención de licencias de conducir y desregular el mercado de automóviles. La Secretaria de Transporte, dirigida por Franco Mogetta, impulsa estas reformas.

Simplificación de licencias de conducir

Una de las principales novedades es la eliminación de la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (LiNTI). En su lugar, serán las jurisdicciones las responsables de emitir las licencias nacionales de categoría profesional interjurisdiccional (C, D y E).

Para los conductores que transportan pasajeros, la obtención de una LiNTI cuesta alrededor de 500.000 pesos, mientras que su renovación ronda los 250.000 pesos. La eliminación de este trámite reducirá significativamente los costos para estos profesionales.

Además, los recursos teóricos prácticos y los exámenes de aptitud psicofísica podrán ser prestados por proveedores públicos y privados registrados ante la Agencia Nacional de Seguridad Vial.

Desregulación de la importación de vehículos

Por otro lado, el Gobierno anunció medidas para facilitar la importación de vehículos en serie y autopartes. El vocero presidencial, Manuel Adorni, explicó que hasta ahora los vehículos importados requerían de la Licencia de Configuración de Modelo (LCM) y la Licencia de Configuración Ambiental (LCA).

Sin embargo, a partir de las nuevas medidas, estos requisitos serán eliminados si los vehículos cuentan con certificados reconocidos internacionalmente.

También se liberará la importación de autopartes, ya que no será necesario el Certificado de Homologación de Autopartes y/o Elementos de Seguridad (CHAS). Esto significa que cualquier persona podrá importar piezas del exterior sin depender de concesionarias o intermediarios que inflan los precios.

Otros cambios

Entre otras modificaciones, el Gobierno también obligará a la incorporación de peajes sin barreras en todas las rutas nacionales.

Además, se introduce el concepto de vehículo autónomo en la normativa vigente, lo que significa que en el futuro se podrá utilizar este tipo de vehículos, incluso en el transporte comercial.

Beneficios de las medidas

Según el Gobierno, estas medidas no afectarán la seguridad vial y reducirán los costos para los conductores y los importadores de vehículos y autopartes. Además, permitirán modernizar el sector automotriz argentino.