Just Eat demanda a Glovo por competencia desleal y reclama 295 millones de euros
La justicia ha admitido a trámite la denuncia interpuesta por Just Eat contra Glovo por competencia desleal. Just Eat, a diferencia de Glovo, opera con trabajadores contratados y no con autónomos. La denuncia fue presentada el 29 de noviembre ante los Juzgados de lo Mercantil de Barcelona. Tres días después, Glovo anunció un cambio de estrategia, abandonando el modelo de falsos autónomos y contratando a sus repartidores.
Just Eat reclama a Glovo un total de 295 millones de euros en concepto de daños y perjuicios. La empresa estima que Glovo ha ahorrado más de 645 millones de euros en los últimos años al contratar falsos autónomos, lo que le ha permitido adquirir una ventaja competitiva significativa.
El cambio de modelo de Glovo
El anuncio de Glovo sobre el cambio de modelo se produjo un día antes de que su consejero delegado, Oscar Pierre, declarara ante la justicia por un presunto delito contra los derechos de los trabajadores. En su comunicado, Glovo afirmó que el nuevo modelo permitirá operar con repartidores laborales y se aplicará a todas las ciudades donde opera la empresa.
Sin embargo, Glovo no ha aclarado en qué punto se encuentra el cambio de modelo ni ha proporcionado información sobre la regularización de sus empleados. Un estudio reciente de la Universidad Complutense y CC OO señala las malas condiciones de los empleados de plataformas en España, con Glovo obteniendo los peores resultados.
Competencia en el sector del delivery
Just Eat es una empresa pionera en el mercado de plataformas de delivery en España, con una plantilla de más de 2.500 empleados. Fue la primera plataforma en firmar un convenio colectivo de empresa con los principales sindicatos del país.
El otro gran actor del delivery en España, Uber Eats, ha ido cambiando de modelo en los últimos años. Actualmente opera con asalariados y autónomos, con un modelo que considera compatible con la ley rider.
Implicaciones legales
Numerosas sentencias han condenado a Glovo por contratar repartidores como falsos autónomos y vulnerar la normativa laboral. Esto sitúa a Just Eat en una situación de desventaja competitiva, ya que incurre en costes adicionales al contratar a sus repartidores por cuenta ajena.
La admisión a trámite de la denuncia por parte de la justicia es un paso importante en el proceso legal contra Glovo. La resolución del caso podría tener implicaciones significativas para el sector del delivery en España y para la protección de los derechos de los trabajadores de las plataformas digitales.
