La Zona de Libre Comercio Africana echa a andar
La Zona de Libre Comercio Africana (AfCFTA), el mayor acuerdo de libre comercio del mundo con 1.300 millones de habitantes, está dando sus primeros pasos. Ya son 54 los países que han firmado el acuerdo y las primeras transacciones internas libres de aranceles son una realidad.
El objetivo de la AfCFTA es derribar los aranceles internos para elevar el comercio intraafricano del 16% actual al 38% en 2030, sacar a 30 millones de personas de la pobreza y subir el PIB continental un 7% en 2035. Sin embargo, el proyecto se enfrenta a numerosos retos, como la fragmentación, la desconfianza entre los Estados, las infraestructuras inadecuadas y la diversidad de monedas.
Un proyecto ambicioso
La AfCFTA es un proyecto ambicioso que pretende crear un mercado común en África que impulse el crecimiento económico y reduzca la pobreza. El acuerdo abarca una amplia gama de sectores, incluyendo el comercio de bienes, servicios, inversión y propiedad intelectual.
El proceso de creación de la AfCFTA ha sido largo y complejo. Las negociaciones comenzaron en 2015 y el acuerdo final se firmó en 2018. Desde entonces, los países han estado trabajando para ratificar el acuerdo y ponerlo en marcha.
Retos y oportunidades
La AfCFTA se enfrenta a numerosos retos, como la fragmentación, la desconfianza entre los Estados, las infraestructuras inadecuadas y la diversidad de monedas.
- Fragmentación: África está dividida en numerosos países pequeños, lo que dificulta la creación de un mercado común.
- Desconfianza: Los países africanos tienen una larga historia de desconfianza entre sí, lo que dificulta la cooperación.
- Infraestructuras inadecuadas: Las infraestructuras de transporte y logística en África son deficientes, lo que dificulta el comercio.
- Diversidad de monedas: África tiene una gran diversidad de monedas, lo que dificulta el comercio y la inversión.
A pesar de estos retos, la AfCFTA también presenta numerosas oportunidades. El acuerdo tiene el potencial de aumentar el comercio intraafricano, impulsar el crecimiento económico y reducir la pobreza.
Conclusión
La AfCFTA es un proyecto ambicioso que tiene el potencial de transformar África. Sin embargo, el proyecto se enfrenta a numerosos retos. Si los países africanos pueden superar estos retos, la AfCFTA puede ayudar a crear un África más próspera y unida.