El precio de los alimentos se modera al 2,5% en agosto: la menor tasa en tres años
La inflación general baja al 2,3% en agosto, su nivel más bajo en un año, mientras que la subyacente retrocede hasta el 2,7%. Estos descensos indican que España está cerca de superar la crisis de precios que ha afectado a los hogares en los dos últimos años.
Bajada de precios de los alimentos
El coste de los alimentos ha disminuido un 2,5%, la tasa más baja desde octubre de 2021. Esta bajada se explica principalmente por la disminución de los precios de los aceites y grasas, así como de las legumbres y hortalizas.
Moderación en el sector energético
El sector energético ha sido uno de los principales factores de la desaceleración de la inflación en agosto. Los combustibles líquidos se han abaratado un 9,8% y el gasóleo un 9,0% respecto a agosto de 2023. El abaratamiento del petróleo ha impactado en el coste de la gasolina, que se encuentra en niveles muy próximos a los de antes de la guerra en Ucrania.
El turismo presiona al alza los servicios
El auge del turismo durante el verano ha generado presiones inflacionarias en los servicios. Los precios de actividades como el alojamiento, la restauración y otros servicios relacionados han subido notablemente. Los vuelos nacionales han repuntado un 21% y los paquetes turísticos nacionales un 12%.
Perspectivas de futuro
Los expertos coinciden en que, a pesar de las posibles fluctuaciones en los servicios o alimentos, la tendencia general de la inflación es favorable y está permitiendo a las familias mantener un buen nivel de consumo. Los salarios, que están creciendo a un ritmo del 2,9%, también están contribuyendo a mejorar el poder adquisitivo de los hogares.
"La energía, especialmente los combustibles, seguirá siendo un factor de alivio. A esto se suma la estabilización del coste de los alimentos, que hasta el año pasado subieron considerablemente por la sequía, el bloqueo de los cereales en el Mar Rojo y el encarecimiento de los fertilizantes, problemas que han ido desapareciendo uno a uno", afirma Manuel Hidalgo, economista y profesor de la Universidad Pablo de Olavide.
Sin embargo, la subyacente, menos influida por factores estacionales, muestra una rigidez a la baja que no se espera que desaparezca hasta el próximo año.