La gestión de deudas y créditos: estrategias para evitar la trampa de los intereses
En la actualidad, el acceso a créditos ha facilitado enormemente la adquisición de bienes y servicios para millones de personas. Sin embargo, si no se gestiona adecuadamente, las deudas pueden convertirse en una pesada carga.
Deudas "buenas" y "malas"
Los expertos financieros destacan que una mala gestión de las deudas no solo afecta a la estabilidad económica, sino también a la salud emocional de los implicados. Para una gestión de deudas eficaz, es esencial distinguir entre las deudas "buenas" y las "malas". Las deudas "buenas" suelen ser aquellas que se contraen para aumentar el patrimonio o la educación, mientras que las deudas "malas" suelen estar relacionadas con gastos que no generan beneficios futuros, como las compras impulsivas de bienes no esenciales.
Métodos para reducir las deudas
Existen dos métodos recomendados para reducir las deudas:
- Estrategia de bola de nieve: Prioriza el pago de las deudas más pequeñas, lo que genera motivación.
- Estrategia avalancha: Busca liquidar primero las deudas con los intereses más altos.
Situación en México
En México, según el último estudio de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), el 43% de las personas adultas tiene algún tipo de crédito, y casi la mitad enfrenta dificultades para cubrir sus cuotas.
En estos casos, buscar una renegociación con las entidades financieras puede aliviar los pagos mensuales o ampliar los plazos, reduciendo el impacto sobre el presupuesto personal.
Conclusión
Mantener las deudas bajo control es fundamental para el crecimiento económico y para evitar caer en la trampa de los intereses elevados. Una gestión adecuada implica distinguir entre deudas "buenas" y "malas", utilizar métodos eficaces para reducirlas y buscar ayuda profesional si es necesario.