McDonald’s denuncia a gigantes cárnicos de Estados Unidos por manipular precios
La icónica cadena de comida rápida McDonald’s ha iniciado acciones legales contra cuatro de los mayores procesadores de carne de vacuno de Estados Unidos: JBS, Tyson, Cargill y National Beef, acusándolos de conspirar para inflar artificialmente los precios de la carne desde al menos 2015.
Supuesta conspiración para subir precios
McDonald’s alega en su demanda que estas empresas se coludieron para restringir la competencia, lo que les permitió controlar el suministro y elevar los precios de la carne de vacuno por encima de los niveles de mercado.
Según la demanda, los acusados coordinaron sus acciones para pagar precios injustamente bajos por el ganado y reducir el suministro de carne de vacuno, lo que provocó un aumento de los precios para McDonald’s y otros compradores.
Evidencia de colusión
McDonald’s cita varias pruebas para respaldar sus acusaciones, incluidas frecuentes reuniones entre ejecutivos de las empresas acusadas y el intercambio de información confidencial.
La demanda también señala la alta concentración en la industria de la carne de vacuno, con estos cuatro procesadores controlando una gran parte del mercado.
Investigaciones gubernamentales
La demanda de McDonald’s se produce en medio de investigaciones en curso por parte del Departamento de Justicia y el Departamento de Agricultura de Estados Unidos sobre posibles prácticas anticompetitivas en la industria de la carne de vacuno.
Otras empresas, como BJ’s Wholesale, Target y Aldi, también han presentado demandas similares contra los procesadores de carne.
Implicaciones para los consumidores
Las acusaciones de McDonald’s plantean preocupaciones sobre el impacto potencial de las prácticas anticompetitivas en los precios de la carne de vacuno para los consumidores.
Si se demuestra que los procesadores de carne han participado en una conducta ilegal, podrían enfrentar sanciones y multas importantes, además de posibles daños y perjuicios a los compradores afectados.
“Esta demanda tiene como objetivo responsabilizar a estas empresas por sus acciones ilegales y proteger a los consumidores de prácticas anticompetitivas que han llevado a precios más altos de la carne”, dijo un portavoz de McDonald’s.
Los procesadores de carne acusados han negado las acusaciones y han dicho que cooperarán con las investigaciones.