Según el último estudio de Manhattan Associates, el 30% de las veces, tanto los minoristas como los empleados de las tiendas no tienen datos precisos sobre el inventario. Actualmente, los minoristas están digitalizando cada vez más su oferta en las tiendas con el objetivo de mejorar la experiencia de los clientes y mantener la cuota de mercado.
En un momento en el que el aumento en los costes de vida ha afectado a los hábitos de compra del 89% de los consumidores, es crucial que los minoristas puedan reconocer los cambios en el comportamiento de los consumidores y actuar en consecuencia. La disponibilidad de datos precisos es fundamental para mejorar la eficiencia y ofrecer información práctica a los empleados de las tiendas.
El estudio también destaca que los consumidores están dispuestos a interactuar activamente a través de distintos canales a la hora de adquirir productos. El correo electrónico y el contacto directo en persona son los canales preferidos, pero las redes sociales están ganando popularidad, especialmente entre los consumidores más jóvenes.
En cuanto a la sostenibilidad, aunque solo el 45% de los consumidores considera importante la sostenibilidad al elegir dónde comprar, las generaciones más jóvenes están más interesadas en los esfuerzos medioambientales de los minoristas. Por otro lado, los minoristas están centrando sus esfuerzos en crear una cadena de suministro más sostenible y concienciada con el medio ambiente.
En conclusión, los minoristas se enfrentan al desafío de mejorar la visibilidad del inventario y ofrecer experiencias de compra fluidas en un entorno omnicanal. La tecnología juega un papel clave en este proceso, pero también es necesario tener en cuenta las preferencias y necesidades de los consumidores.