Medidas fiscales vuelven a afectar a Reino Unido, bonos a 10 años en máximos desde 2008
El Reino Unido se encuentra una vez más en el punto de mira de los inversores. En un día de fuertes ventas en el mercado de deuda, ante la posibilidad de que los planes arancelarios del próximo presidente estadounidense, Donald Trump, provoquen un aumento de la inflación a nivel mundial, la rentabilidad del bono británico a diez años ha aumentado hasta el 4,78%, su nivel más alto desde octubre de 2008, lo que genera dudas sobre la capacidad del gobierno británico para implementar las normas fiscales.
El aumento también se refleja en el rendimiento de la deuda a 30 años, que ha alcanzado su máximo desde 1998, mientras que en el mercado de divisas, la libra cae a su nivel más bajo frente al dólar desde abril.
Impacto en el mercado de divisas
El impacto también se está haciendo sentir en el mercado de divisas, donde la libra pierde más del 1% frente al dólar y se sitúa en los 1,233 dólares, su nivel más bajo desde abril de 2024. Según Ebury, Matthew Ryan, jefe de estrategia de mercado de la firma global de servicios financieros, comenta que la ansiedad por la economía del Reino Unido está causando «nerviosismo en las transacciones».
Preocupaciones sobre las perspectivas económicas
«La libra esterlina cayó por debajo del nivel de 1,25 frente al dólar ayer, un movimiento impulsado casi en su totalidad por la fortaleza del dólar tras las cifras del PMI estadounidense del martes. Sin embargo, las preocupaciones sobre las perspectivas de la economía del Reino Unido siguen presentes en un segundo plano, y eso está frenando en parte el avance de la libra, que ha estado entre las de peor desempeño en el G10 durante la semana pasada.
El mercado espera con expectación las medidas de la nueva administración estadounidense. A dos semanas de que el republicano asuma el cargo y desembarque en la Casa Blanca, ha amenazado con más aranceles a Canadá, México y Panamá, y no ha descartado declarar la emergencia nacional para ello.
Dilema del Banco de Inglaterra
El último aumento de los rendimientos vuelve a coincidir con las medidas fiscales que está preparando la ministra de Hacienda británica, Rachel Reeves, para lograr la disciplina financiera. Steven Bell, economista jefe para Europa, Oriente Medio y África en Columbia Threadneedle Investments, señala que, a la debilidad económica de la eurozona, el principal socio comercial del Reino Unido, y al aumento de los precios energéticos, se suman las grandes subidas de impuestos, gastos y préstamos que está preparando el gobierno. «Sin un aumento de la productividad, el aumento de las cotizaciones patronales a la seguridad social conducirá a una reducción del empleo, una mayor inflación y el cierre de empresas», destaca el experto.
Aunque el nuevo Primer Ministro ha mantenido los incentivos a la inversión del gobierno anterior, Bell cree que la economía británica registrará una mayor inflación y un menor crecimiento en 2025. «Esto planteará un dilema al Banco de Inglaterra: tendrá que mantener altos los tipos de interés para contener la inflación, pero se verá presionado a seguir recortándolos dada la debilidad de la economía», destaca el gestor.
Perspectivas a largo plazo
Los expertos de ING indican que «aunque no creemos que unos tipos tan elevados sean sostenibles a largo plazo, es difícil identificar los catalizadores de un cambio de dirección en el corto plazo. La inflación debería bajar, pero los mercados necesitarán una serie de lecturas mejores para convencerse. Además, las preocupaciones sobre las ambiciones de gasto del Partido Laborista seguirán persistiendo, mientras que el sentimiento bajista estadounidense tiene fuertes repercusiones en el mercado de bonos del Estado. Así que, a menos que alguno de estos ingredientes cambie, estos tipos más altos pueden durar un poco más».
«Si bien la velocidad y el alcance del aumento de las rentabilidades no están siendo tan violentos como los experimentados en 2022 con el proyecto de Lizz Truss, no se debe subestimar el impacto de los tipos más altos en la economía y, en particular, en lo que respecta a las tasas hipotecarias», señala a Bloomberg Mathew Ryan, jefe de estrategia de mercado en Ebury.
Citas:
- G.E., L.S. (2025, 8 de enero). Las medidas fiscales vuelven a pasar factura a Reino Unido: el bono a 10 años sube a máximos de 2008. El País. https://elpais.com/economia/2025-01-08/las-medidas-fiscales-vuelven-a-pasar-factura-a-reino-unido-el-bono-a-10-anos-sube-a-maximos-de-2008.html