Texas retoma el control de la SH-288

La joya de la corona de ACS y Abertis en EE. UU.

El Estado de Texas ha decidido recuperar la titularidad de la autopista SH-288, la mayor que explotaban las dos compañías españolas en Estados Unidos. La Comisión de Transportes de Texas suspendió el viernes las negociaciones con ACS y Abertis para renovar el acuerdo sobre esta autopista de peaje que da servicio a la ciudad de Houston.

En virtud del contrato que regía sobre la explotación de la autopista, el proyecto pasará de nuevo a ser propiedad pública del Estado de Texas mediante el pago de 1.732 millones de dólares, de los cuales 524 millones corresponden a Iridium Infraestructuras, filial del Grupo ACS.

"La terminación del contrato, neto de provisiones y otros resultados, incluido el de Abertis, no tendrá un impacto significativo en el beneficio neto consolidado previsto para 2024 del Grupo ACS", ha asegurado la empresa en una información relevante remitida a la CNMV.

¿Por qué Texas ha decidido recuperar la autopista?

A la SH-288 le quedaban más de 40 años de plazo de explotación, pero la Comisión de Transporte ha expresado en distintos documentos que, en estos momentos, es más ventajoso para ella finalizar el contrato concesional que seguir adelante.

Es decir, la opción de recompra del activo está por debajo del valor de la cartera de ingresos futuros de la autopista.

En marzo, cuando Texas inició el proceso, ACS argumentó que la infraestructura había funcionado "con notable éxito" desde su entrada en funcionamiento en noviembre de 2020.

El largo recorrido de ACS y Abertis en la SH-288

ACS alcanzó en marzo de 2023 el 100% del capital de la concesionaria de la SH-288 (Blueridge Transportation Group). Entonces se hizo con un 21,62% del capital en manos de Shikun & Binui, a través de su filial Iridium, por 450 millones de dólares.

Anteriormente, la constructora había pagado 1.063 millones de euros por el 78,38% que ostentaba antes de esa última operación.

Con el control total del activo, la siguiente decisión fue traspasar la mayoría a Abertis, firma de autopistas que comparte con la italiana Mundys y que tiene en EE. UU. su destino prioritario de desarrollo.

La catalana pagó el pasado diciembre 1.423 millones por el 56,8% del capital, lo que dejó una plusvalía neta de 180 millones para ACS al cierre de 2023.

Reacciones de ACS y Abertis

ACS ha asegurado que la terminación del contrato no tendrá un impacto significativo en sus resultados previstos para 2024.

Por su parte, Abertis no ha hecho declaraciones al respecto.