Trump congela fondos para el Río Colorado, poniendo en riesgo acuerdos con México

La decisión de la administración Trump de retener fondos destinados a la conservación del Río Colorado está generando una gran controversia y poniendo en peligro los acuerdos de distribución de agua entre Estados Unidos y México. Esta medida, que afecta directamente la salud del afluente y la sostenibilidad de las comunidades que dependen de él, ha sido calificada como «un verdadero caos» por activistas y expertos en la materia.

¿Qué está pasando con el Río Colorado?

El Río Colorado, una fuente vital de agua para 40 millones de personas y más de 2.2 millones de hectáreas de tierras agrícolas en siete estados, enfrenta una grave crisis debido a la sequía persistente y la sobreexplotación. La congelación de fondos federales, aprobados por el Congreso para la preservación del agua, amenaza con exacerbar aún más la situación, poniendo en riesgo la supervivencia del río y los acuerdos binacionales. Según EFE (2025), la administración Trump está provocando un verdadero caos con esta medida, poniendo en riesgo las medidas que por años se han tomado para mantener los niveles de agua saludables.

Impacto en los acuerdos entre Estados Unidos y México

Los acuerdos sobre la distribución del agua entre Estados Unidos y México están en una situación delicada. Estos acuerdos, que buscan garantizar un suministro equitativo y sostenible del recurso, podrían verse comprometidos si no se toman medidas urgentes para abordar la crisis del Río Colorado.

Sandy Bahr, directora de Sierra Club del Departamento del Gran Cañón en Arizona, citada por El Financiero (EFE, 2025), advierte que las repercusiones a corto y largo plazo de esta congelación de fondos ponen en riesgo las medidas que por años se han tomado para mantener los niveles de agua saludables.

El Programa de Eficiencia y Conservación en peligro

Una de las iniciativas más afectadas por la congelación de fondos es el Programa de Eficiencia y Conservación del Sistema de la Parte Baja del Río Colorado. Este programa, crucial para agregar agua al lago Mead, el embalse más grande de Estados Unidos en cuanto a capacidad de agua, ha logrado inyectar 1.2 millones de metros cúbicos de agua al lago en los últimos dos años, incrementando su nivel unos 2.7 metros.

El lago Mead, ubicado entre Nevada y Arizona, es una fuente crucial de agua para millones de personas en Nevada, Arizona, California y México. Gracias a este programa, se logró un histórico acuerdo entre esos tres estados para recortar por lo menos 3,7 millones de metros cúbicos de agua hasta 2026.

¿Qué medidas se están tomando?

Ante esta situación, congresistas y senadores de varios de los estados afectados, incluyendo Arizona, California y Nevada, han enviado cartas urgiendo al Departamento del Interior a liberar los fondos cuanto antes. En una de estas misivas, los senadores Alex Padilla (California), Catherine Cortez Masto y Jacky Rosen (Nevada), y Rubén Gallego (Arizona) aseguran que este programa de conservación ha sido fundamental para incrementar la conservación de agua y prevenir que se registren peligrosos niveles que amenacen la distribución del líquido y la producción de energía.

Un futuro incierto para el Río Colorado

Años de sobreexplotación, junto con el calentamiento global y la constante sequía, están amenazando el caudal del Río Colorado, el cual se ha reducido drásticamente en una década. Bahr teme que los niveles de agua bajen drásticamente y se tengan que tomar medidas aún más drásticas. El año pasado, el Departamento del Interior estadounidense anunció para 2025 una reducción del 18 por ciento para Arizona de la cantidad de agua que recibe del río, una reducción del 7 por ciento para el resto de los estados y del 5 por ciento para México.

Renegociación de acuerdos en riesgo

La congelación de fondos llega en un momento crítico, justo cuando los estados se están preparando para volver a negociar el acuerdo de conservación que termina a finales del próximo año. La falta de confianza de los estados hacia la administración Trump, que parece no estar interesada en preservar el medio ambiente, se presenta como el principal obstáculo en estas negociaciones.

Otra preocupación importante son los despidos masivos en el Gobierno Trump. La incertidumbre sobre cuánta gente quedará y cuántos de ellos estarán capacitados para llevar a cabo tan importantes negociaciones genera inquietud sobre el futuro del Río Colorado y la seguridad hídrica de millones de personas.