Gerardo Ortiz: Testigo, no culpable, en investigación por conciertos vinculados al narcotráfico
El controvertido cantante de música regional mexicana, Gerardo Ortiz, se encuentra nuevamente en el ojo del huracán mediático. Esta vez, las acusaciones giran en torno a su presunta participación en conciertos organizados por promotores vinculados a organizaciones sancionadas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Sin embargo, su abogado, Mark J. Werksman, está saliendo al paso para desmentir categóricamente las versiones que lo señalan como culpable.
Según Werksman, Ortiz está colaborando plenamente con las autoridades como testigo en el juicio, aclarando que su participación se limitó a presentarse en eventos que, según le aseguraron, no representaban ningún riesgo legal. La defensa enfatiza que Ortiz no está involucrado en actividades criminales ni ha cooperado para incriminar a terceros.

¿Qué está pasando realmente?
La conexión de Ortiz con este caso se está originando a través de su exrepresentante, Ángel del Villar, dueño de Del Records. Del Villar, a su vez, estaría vinculado con Jesús Pérez Alvear, un promotor de conciertos señalado por las autoridades estadounidenses por su presunta relación con el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG). Las investigaciones están apuntando a que Pérez Alvear, conocido como “Chucho”, supuestamente lavaba dinero a través de su promotora, Gallística Diamante.
Fuentes indican que Ortiz, en varias ocasiones, se habría negado a participar en conciertos organizados por Pérez, pero fue persuadido por Del Villar. La defensa de Ortiz insiste en que el cantante nunca tuvo conocimiento de los presuntos vínculos ilícitos de los promotores involucrados.

La OFAC y su lista negra
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) está incluyendo en su lista negra a diversas entidades y personas por su presunta vinculación con actividades delictivas, incluyendo el narcotráfico. Esta medida está impidiendo que ciudadanos y empresas estadounidenses, como Gerardo Ortiz, puedan realizar negocios con estas entidades. No obstante, el abogado de Ortiz está insistiendo que su cliente desconocía por completo que los promotores con los que trabajaba estuvieran relacionados con organizaciones criminales, según informa El Imparcial (2025).
El asesinato de “Chucho” y el impacto en el caso
La figura de Jesús Pérez Alvear está tomando un papel crucial en el caso, especialmente tras su asesinato en diciembre de 2024 en la Ciudad de México. Según las autoridades mexicanas, el ataque fue directo y está directamente relacionado con las investigaciones que lo vinculaban al narcotráfico y al lavado de dinero, manteniendo a Ortiz en el centro de la polémica.
¿Qué sigue para Gerardo Ortiz?
Por el momento, ni Gerardo Ortiz ni su equipo están emitiendo comentarios adicionales sobre el tema. Se espera que en los próximos días surjan nuevos detalles sobre el proceso legal. Aún no se ha confirmado si el cantante será citado nuevamente como testigo o si las acusaciones en su contra serán modificadas.
El papel de la defensa
El abogado Mark J. Werksman, representando a Gerardo Ortiz, está siendo enfático en que su cliente ha actuado únicamente como testigo en relación con su participación en los conciertos realizados en México. Según Werksman, citado por Ximena Cordova (2025) de El Imparcial, los eventos fueron gestionados por el exrepresentante de Ortiz, quien aseguró al cantante y a otros artistas que podían actuar sin riesgos legales. Sin embargo, estos conciertos, realizados bajo contratos firmados por su exrepresentante, resultaron en una violación a la ley federal debido a la vinculación de los promotores con la OFAC.
Implicaciones legales y futuras acciones
La defensa de Ortiz está enfatizando que el cantante nunca tuvo conocimiento de los vínculos ilícitos de los promotores involucrados. Hasta ahora, están reiterando que Ortiz no está involucrado en conspiraciones ni negociaciones con cárteles mexicanos. La situación está generando un gran revuelo mediático, y aún no está claro si se presentarán nuevas pruebas que involucren al cantante o a su equipo en actividades ilegales.
Conclusión
Mientras el proceso legal continúa desarrollándose, Gerardo Ortiz está manteniendo una postura de silencio, confiando en que la verdad saldrá a la luz y se demostrará su inocencia. El caso está generando un intenso debate sobre la responsabilidad de los artistas en la verificación de la legitimidad de los promotores con los que trabajan, y sobre los riesgos de operar en un entorno donde las líneas entre el entretenimiento y el crimen organizado pueden ser difusas.
La información aquí presentada se está basando en reportes de El Imparcial y declaraciones del abogado Mark J. Werksman.