Después de ocho largos años, Angelina Jolie y Brad Pitt han llegado a un acuerdo de divorcio, poniendo fin a uno de los procesos de divorcio más mediáticos y disputados de Hollywood.
Un arduo y prolongado proceso
La estrella de "Maléfica" solicitó el divorcio en septiembre de 2016, citando diferencias irreconciliables. Desde entonces, la pareja ha estado involucrada en una batalla legal que ha incluido disputas sobre la custodia de sus hijos, acusaciones de abuso y una lucha por su negocio vinícola compartido.
En un comunicado, el abogado de Jolie, James Simon, declaró que su clienta ha estado "centrada en encontrar la paz y la sanación" para su familia. "Esta es sólo una parte de un largo proceso que comenzó hace ocho años. Francamente, Angelina está agotada, pero se siente aliviada de que esta parte haya terminado".
Disputas y acusaciones
El proceso de divorcio ha estado marcado por una serie de disputas y acusaciones. En 2022, salieron a la luz detalles de un supuesto altercado físico en un avión privado en el que estuvo involucrado uno de sus hijos, Maddox. Pitt fue investigado por abuso infantil, pero posteriormente fue absuelto.
Jolie también ha acusado a Pitt de abuso físico, lo cual él ha negado. Además, la pareja ha estado en desacuerdo sobre la venta de su negocio vinícola compartido, Château Miraval.
A pesar de las dificultades, ambas partes han expresado su compromiso con el bienestar de sus hijos y su deseo de seguir adelante con sus vidas.
Fin de una era
El acuerdo de divorcio representa el fin de una era para una de las parejas más famosas del mundo. Jolie y Pitt se casaron en 2014 después de una relación de 10 años, pero su matrimonio estuvo marcado por problemas desde el principio.
El proceso de divorcio ha sido doloroso y agotador, pero ambas partes parecen decididas a dejar atrás el pasado y construir nuevos capítulos en sus vidas.
"Ella no habla mal de [Pitt] ni en público ni en privado. Ha estado esforzándose por ser una luz después de un período oscuro". - Fuente cercana a Angelina Jolie