Mujer confunde síntomas de estrés post-divorcio con enfermedad incurable
Un diagnóstico inesperado tras un divorcio complicado
La vida de Diana Keys, una mujer de 65 años residente en Clevedon, Reino Unido, está tomando un giro inesperado. Después de un divorcio que puso fin a 35 años de matrimonio en 2019, Keys comenzó a experimentar una serie de síntomas desconcertantes que inicialmente fueron atribuidos al estrés emocional asociado con la separación. Sin embargo, lo que parecía ser una reacción comprensible a un momento difícil resultó ser la manifestación de una enfermedad incurable: la enfermedad de la neurona motora (EMN).
Los primeros signos: caídas y confusión
Según informa Noticias Caracol (2024), en medio de este proceso de divorcio, Keys empezó a sufrir caídas inexplicables, a confundir palabras y a experimentar dificultades para hablar. «Me caí en el baño y me golpeé la cabeza en la ducha y, después de que eso ocurriera dos o tres veces, contacté al médico de cabecera», relató Keys al diario The Sun. Preocupada por estos síntomas inusuales, decidió buscar atención médica.
Descartando el estrés: la búsqueda de respuestas
Inicialmente, los médicos sugirieron que estos síntomas podrían ser «funcionales debido al estrés de [su] divorcio». Sin embargo, Keys no estaba convencida. Habiendo experimentado depresión en el pasado, ella sentía que estos problemas eran de naturaleza física y no emocional. «He sufrido depresión, así que sé cómo se siente, y los problemas que tenía eran físicos», explicó. Persistente en su búsqueda de respuestas, continuó consultando a diferentes médicos, pero ninguno pudo ofrecerle un diagnóstico claro.
El diagnóstico devastador: enfermedad de la neurona motora
No fue sino hasta mayo de 2023, tres años después de la aparición de los primeros síntomas, que Diana Keys recibió un diagnóstico que cambiaría su vida para siempre. Tras una exhaustiva evaluación, se le diagnosticó enfermedad de la neurona motora (EMN), una condición incurable que afecta las neuronas que controlan los músculos, provocando debilidad muscular progresiva y atrofia visible.
Un pronóstico sombrío
Según Noticias Caracol (2024), lo más impactante del diagnóstico fue el pronóstico. Debido al avance de la enfermedad durante los tres años anteriores, los médicos le dieron a Keys entre dos y cinco años de vida. «Recuerdo que el médico simplemente dijo: 'No hay cura y el pronóstico es de entre dos y cinco años'. Pensé: 'Dios mío, esto es horrible'», recordó Keys. A pesar de la devastadora noticia, decidió seguir trabajando como directora de una escuela primaria hasta noviembre de 2024, cuando se dio cuenta de que ya no podía seguir desempeñando sus funciones.
Viviendo con EMN: desafíos diarios
Actualmente, Diana Keys está retirada y enfrenta los desafíos diarios que impone la EMN. La enfermedad afecta su movilidad, su habla y la deja «luchando» constantemente con tareas cotidianas como cocinar, servirse una taza de té o sacar dinero de su bolso para pagar. «No puedo cortar bien la comida y, cuando como en grupo, tiendo a que se me queden cosas atascadas en la garganta, lo cual es vergonzoso, así que ahora tengo que comer sola», confesó Keys.
Manteniendo la esperanza: una actitud positiva
A pesar del sombrío panorama, Diana Keys se mantiene resiliente y decidida a vivir al máximo el tiempo que le queda. Según María Paula González (2024), periodista digital de Noticias Caracol, han pasado ya dos años desde su diagnóstico y la mujer de 65 años asegura que «sigo buscando el código de fecha de caducidad, pero no hay ninguno, así que sigo adelante». Ha decidido compartir su historia en diferentes portales internacionales para crear conciencia sobre esta enfermedad incurable.
«Desde mi diagnóstico he tratado de no desanimar a los demás; trato de ser estoica. Intento mantener el sentido del humor y agradecer mis bendiciones, así que tengo mucho por lo que vivir», enfatizó Keys.
Encontrando alivio en el divorcio
Incluso en medio de esta difícil situación, Diana Keys encuentra un peculiar alivio en su divorcio. «Me alegro de que no tenga que lidiar conmigo, con esta terrible enfermedad, así que me siento aliviada de que pueda encontrar la felicidad en otro lugar», reflexionó Keys, mostrando una sorprendente perspectiva sobre su situación.
La importancia de la concientización
La historia de Diana Keys sirve como un recordatorio de la importancia de escuchar a nuestro cuerpo y de buscar segundas opiniones médicas cuando algo no se siente bien. También destaca la necesidad de aumentar la conciencia sobre la enfermedad de la neurona motora, una condición devastadora que afecta a miles de personas en todo el mundo.
Referencias
- Noticias Caracol. (2024). Creyó que tenía estrés por el divorcio, pero era una enfermedad incurable. Recuperado de https://www.noticiascaracol.com/mundo/creyo-que-tenia-estres-por-el-divorcio-pero-era-una-enfermedad-incurable-rg10