Anne Hathaway revela pruebas incómodas en los castings de Hollywood
Anne Hathaway, la reconocida actriz de 41 años, ha compartido recuerdos desagradables de su carrera como actriz en la década de los 2000. En una entrevista reciente con V Magazine, Hathaway reveló que tuvo que besar a una decena de hombres consecutivamente frente a directores de casting.
Según Hathaway, en esa época era común solicitar a los actores que se besaran entre sí para medir la química, pero ella consideró esta práctica como inaceptable. A pesar de su incomodidad, fingió estar emocionada para evitar ser etiquetada como una actriz "difícil".
Un cambio de paradigma en los castings
Ahora, como productora y protagonista de películas, Hathaway está decidida a romper con estas prácticas obsoletas. En su reciente proyecto, "La idea de tenerte", Hathaway implementó un método de casting más respetuoso.
"Le pedimos a cada actor que eligiera una canción que creyera que le encantaría a su personaje, y luego haríamos una improvisación sencilla. Estábamos en un espacio bailando, nadie trataba de impresionar ni competir. De esta forma, encontramos la chispa sin necesidad de besos incómodos", explicó Hathaway.
Hathaway también se ha pronunciado en contra de los prejuicios de edad que enfrentan las mujeres en la industria del cine. En 2023, comentó que una vez le advirtieron que su carrera declinaría abruptamente después de los 35 años.
Sin embargo, la experiencia de Hathaway demuestra que las mujeres están desafiando estos estereotipos y forjando carreras longevas. Ella continúa inspirando a otras a superar las barreras y a defender lo que creen.
Hathaway redefine la dinámica de poder
A lo largo de su carrera, Hathaway ha aprendido a establecer límites y no tolerar comportamientos poco profesionales. Ella cree que es crucial que los actores respeten su propio valor y se nieguen a participar en prácticas que los hagan sentir incómodos.
"Ya no tengo miedo de perderlo todo por no hacer lo que no quiero hacer. Los 20 años de experiencia me han enseñado que el respeto y la dignidad son primordiales", afirmó Hathaway.
La historia de Hathaway es un testimonio del empoderamiento de las mujeres en la industria del cine. Su voz y acciones están contribuyendo a crear un entorno más justo e inclusivo tanto dentro como fuera de la pantalla.