Dos décadas de Arte: Un libro imprescindible para el arte argentino

La Academia Nacional de Bellas Artes ha presentado el volumen XIII de su monumental "Historia General del Arte en la Argentina", que abarca el periodo 2000-2020, en un acto en el que se han destacado los cambios de paradigma que se han producido en los últimos 20 años, impactando en la arquitectura, las artes visuales y la música.

El eje principal de este volumen es la transversalidad y las diferentes expresiones artísticas, tratadas de forma integral. Dentro de las artes visuales, se destaca el efecto del arte de acción y la performance, los colectivos artísticos y la descentralización del circuito artístico de Buenos Aires.

Pintura

Bajo el título "Tantas veces la mataron, tantas resucitó y siempre aquí, retemplada en carne viva", Ana María Battistozzi analiza la sección de Pintura. El consenso generalizado de la división por disciplinas ya no es válido para el arte contemporáneo, y los artistas migran libremente de un medio a otro.

El recorrido del texto indica la aparición en las dos primeras décadas del siglo XXI de un importante número de artistas que eligieron la práctica pictórica en un momento de auge de las nuevas tecnologías. Battistozzi destaca las obras de Max Gómez Canle, Alberto Passolini, José Luis Landet, Cristina Schiavi, Graciela Hasper, Leila Tschopp, Verónica Gómez, Hernán Salamanco y Paola Vega, entre otros.

Escultura

María Carolina Baulo titula su ensayo "La Escultura- Habitante del Espacio", en el que adopta un criterio de trabajo que vincula a los artistas reseñados con otros que comparten estéticas afines. En primer lugar, se refiere al legado de artistas innovadores como Nora Correas, Hernán Dompé, Lydia Galego, Ana Lizaso, Luciá Pacenza, Claudia Aranovich, Fernández Olivi, Jorge Gamarra, Enio Iommi, Juan Carlos Distéfano y Jacques Bedel, entre otros, que han alcanzado reconocimiento internacional.

Baulo también menciona a artistas que han roto los cánones establecidos, como Cristina Schiavi, Paulina Webb y Carola Zech, que utilizan recursos plásticos diversos. La lista de artistas que Baulo menciona y que crean objetos, esculturas e instalaciones y se acercan a lo multidisciplinario es enorme, e incluye a Amestoy, Marcela Cabutti, Diego Bianchi y Claudia Fontes.

Dibujo

Laura Casanovas aborda el tema de las "Políticas del Dibujo y sus rasgos de época". Surgen nombres de destacados artistas además de aquellos nacidos entre los 70 y 80, como Matías Duville, Mauro Giaconi, Rodríguez Giles, Pablo Lehman, Mauro Koliva, Paula Otegui, Matías Ercole, Viviana Blanco, Verónica Gómez, Martín La Rosa y Julián de la Mota.

Según Casanovas, el renovado protagonismo del dibujo coincide con el inicio del siglo XXI, aunque ya en los 90 varios artistas iniciaron la transformación mencionada en un volumen anterior por Taverna Irigoyen: Ernesto Ballesteros, Marina De Caro, Lux Lindner, Cecilia Ivancevich, Mónica Millán, Beatriz Moreiro y Marcelo Pombo. Otros artistas como Catalina Chervin, Eduardo Stupía, José Marchi y Diego Perrotta también constituyeron una gran renovación.

Por iniciativa de Marino Santa María se creó la carrera de Profesor Nacional de Dibujo y la primera edición del Premio Alberto J. Trabucco dedicada a esta disciplina, otorgado por la Academia Nacional de Bellas Artes. Casanovas destaca el espacio en el Centro Cultural Borges "La línea piensa", donde se sucedieron 121 muestras de 140 artistas.

Fotografía

Silvia Pérez Fernández y Verónica Tell son las autoras de "Entre lo estético poético y el documentalismo. Los límites porosos de la fotografía y sus espacios de acción". Establecen una distinción entre fotografía artística, documental o periodística.

El milenio comenzó con un gran estallido social, y se registraron las críticas jornadas de 2001, testimonio de saqueos, reclamo popular y represión policial. Pérez Fernández y Tell mencionan a Gabriel Valansi, que recorría de noche el centro de Buenos Aires, cuyo resultado fue "Night Shots".

Los campos de detención ilegal durante la dictadura en Tucumán fueron registrados por Diego Aráuz y Lucila Quieto, y los de la Esma por Inés Ulanovsky. Helen Zout realizó en la primera década del siglo distintas series relacionadas con persecuciones, secuestros, desapariciones y razzias militares; otro artista de renombre como Marcelo Brodsky realizó, entre su vasta documentación, "Memoria en Construcción: el debate sobre la ESMA"; y Marcos Zimmerman se dedicó a la vida cultural, social, laboral y religiosa en lugares a los que el autor volvía después de décadas de haberlos fotografiado por primera vez.

También aparecen nombres como Adriana Lestido, Guadalupe Miles, Alessandra Sanguinetti, Santiago Porter, Juan Travnik, Res y Gian Paolo Minelli. Ananké Asseff retrata la violencia sugerida a través de personas de tamaño natural, armadas, en poses mirando a cámara. Marcos López y su Pop Latino con sus grandes puestas en escena, así como Nicola Constantino, protagonista de sus composiciones, tampoco podían faltar.

Grabado y Gráfica

Matilde Marín y Leticia Mello documentan un itinerario que revela trayectos que han ido más allá de los grandes centros de producción artística, proponiendo una descentralización de la disciplina del grabado y la gráfica en general. Este enfoque permite explorar matices y perspectivas diferentes visibilizando un mapa federal que revela la identidad de sus respectivas regiones de origen con lo contemporáneo.

Este núcleo también cuenta con colaboraciones de Silvia Dolinko acerca de la gráfica expandida, los grupos y la calle. Natalia Silberleib se ocupa de las publicaciones de artistas.

Textil

La destacada artista textil Gracia Cutuli es la autora de "El poder expresivo del textil", cuya presencia se ha mantenido como un elemento de orientación cultural. Se reivindican las culturas originarias, la indumentaria, la joyería textil, la memoria textil, las manifestaciones de género, las denuncias sociales y políticas, las esculturas flexibles y las poéticas de la materia para finalizar con el textil ligado a la cibernética.

Música

Guillermo Scarabino investigó lo ocurrido durante siete décadas y media en el ambiente musical argentino y según sus palabras "a pesar de las profundas crisis políticas, sociales y económicas", el resultado de su investigación es altamente positivo, con creaciones felices. El énfasis está también puesto en la descentralización, la creación de conservatorios, coros, orquestas y conjuntos de cámara vocales e instrumentales.

Nuevas Tecnologías

Jazmín Adler titula su ensayo "Arte Argentino y Nuevas Tecnologías- Obras, prácticas y proyectos en el tercer milenio", cuya llegada "no puede ser pensada si no es a la luz de la revolución digital". Desfilan nombres significativos: Graciela Taquini, Gabriela Golder, Mariela Yeregui, Gustavo Romano, Art Detroy, Silvia Rivas, Mariano Sardón y Florencia Levy.

La influencia de Fundación Telefónica, investigadores como Rodrigo Alonso y Norberto Griffa, y la creación de instituciones dedicadas a su difusión han proporcionado un gran impulso a la producción y exhibición de obras contemporáneas.