La plataforma de streaming Netflix se encuentra envuelta en serios problemas legales después de que una jueza fallara a favor de Fiona Harvey, la mujer que inspiró al personaje de "Martha" en la serie Baby Reindeer.
El fallo judicial abre la puerta a una demanda por difamación
Según el fallo emitido el pasado viernes, la serie, creada por el comediante Richard Gadd, incumplió su promesa de ser una "historia real". Esta decisión deja abierta la posibilidad de que Harvey proceda con su demanda por difamación contra Netflix, alegando que la serie la presenta falsamente como una agresora sexual y que su comportamiento, según se describe en el programa, es mucho peor que en la vida real.
Netflix intentó desestimar el caso sin éxito
Netflix había intentado que el caso fuera desestimado en julio, argumentando que la serie es una adaptación dramática de los eventos. Sin embargo, la jueza Gary Klausner rechazó este argumento, señalando que la serie comienza con la frase "Esta es una historia real", lo que invita al espectador a tomar los hechos como verdaderos.
Klausner también subrayó que las acciones de "Martha" en la serie son significativamente más graves que las que supuestamente Harvey cometió en la realidad. "La diferencia entre ser acosador y ser condenado por acoso en un tribunal de justicia es enorme", escribió Klausner. "De igual manera, hay grandes diferencias entre tocar de manera inapropiada y la agresión sexual, así como entre empujar y tratar de sacarle los ojos a otra persona".
Harvey podría identificar fácilmente a pesar de no nombrarla
Aunque el personaje de "Martha" nunca menciona el nombre real de Harvey, la jueza señaló que los espectadores podrían identificarla fácilmente gracias a pistas dejadas en la serie y en línea. El propio Gadd reconoció que, aunque la serie está inspirada en hechos reales, tanto el show como la obra de teatro en la que se basa son "ficcionalizaciones" y no deben tomarse como una narración exacta.
Netflix podría haber actuado de mala fe
Según un informe de The Sunday Times publicado en junio, Gadd tenía dudas sobre incluir la frase "Esta es una historia real" en la serie, pero afirmó que fue Netflix quien insistió en agregarla. Esta decisión de la plataforma podría evidenciar "mala fe", según la jueza, lo que implica que sabían que la historia estaba dramatizada, pero decidieron promocionarla como verdadera.
Si bien la jueza Klausner desestimó varias de las acusaciones de Harvey, como negligencia y daños punitivos, permitió que siguiera adelante con la demanda por "intento de infligir angustia emocional". Este tipo de acusación se aplica cuando las declaraciones falsas se consideran "extremas y escandalosas".
La historia de Baby Reindeer, que se presentaba como un drama basado en hechos reales, podría ahora costarle a Netflix más que solo un golpe a su reputación.