El coro románico de piedra de la Catedral de Santiago, destruido en 1604, renace digitalmente

El proyecto KosmoTech 1200 ha reconstruido digitalmente el coro pétreo de la Catedral de Santiago, destruido en 1604. La reconstrucción se ha basado en las últimas piezas recuperadas y en las técnicas digitales, que han permitido recrear estructuras, colores, tejidos, sonidos, mobiliario e iluminación del espacio.

Un coro único en la cristiandad

El coro pétreo de la Catedral de Santiago era una obra maestra del taller del Maestro Mateo, que complementaba al Pórtico de la Gloria en su estética y mensaje iconográfico. El coro estaba formado por 72 sitiales, con una espléndida "vía sacra" que lo atravesaba y una tribuna que lo recorría en un segundo nivel, que acogía las reuniones del cabildo y servía para presenciar conciertos, procesiones y representaciones.

En el coro se representaba por primera vez una polifonía de niños, dirigidos por el rey David, que ejerce como maestro cantor. Entre ellos se comunican a través de la técnica conocida como "mano guidoniana", un sistema entonces novedoso que servía para indicar las notas con gestos (señalando zonas de la mano izquierda levantada) a los pupilos y construir así, "el complejo edificio vocal" de la polifonía.

La destrucción del coro

El coro pétreo fue destruido en 1604 para adecuar el espacio de culto a los mandatos del Concilio de Trento. Las piezas que lo componían fueron dispersadas, algunas utilizadas como material de relleno o para construir casas y otras guardadas en el tesoro de la catedral.

La reconstrucción digital

El proyecto KosmoTech 1200 ha logrado reconstruir digitalmente el coro pétreo a partir de las piezas recuperadas y de las técnicas digitales. La reconstrucción se ha basado en un largo rastreo en manuscritos de la época, en los restos todavía presentes en la piedra y en los pigmentos originales del Pórtico de la Gloria.

La reconstrucción digital ha permitido resolver algunos de los "enigmas del coro" mateano, como la verdadera ubicación de unos paneles de estrellas perladas que fueron catalogados ya como "sofitos" (techo inferior visible de un voladizo).

El sueño de "rematerializar" el coro

El equipo de KosmoTech 1200 sueña con "rematerializar" el coro pétreo. Con financiación y las nuevas tecnologías ven posible que algún día el público, con gafas de realidad virtual, pueda sumergirse en el espacio del coro, escuchar su música o contemplar el juego de luces de las velas de cera o las lámparas de aceite que alumbrarían teatralmente tras los doseles.

El proyecto KosmoTech 1200 ha sido respaldado por el Ministerio de Ciencia e Innovación y fondos europeos Next Generation.