La empresa Virgin Galactic ha marcado un nuevo hito en la investigación científica espacial con su reciente misión Galactic 05, convirtiendo su nave espacial en un laboratorio suborbital único. A bordo del VSS Unity se encontraban el Dr. Alan Stern, Kellie Gerardi, y la franco-italiana Ketty Pucci-Sisti Maisonrouge, quienes llevaron a cabo experimentos enfocados en la fisiología humana y la bioastronáutica.
El Dr. Stern, con un prolífico pasado como investigador principal de la misión Nuevos Horizontes a Plutón, voló con experimentos que recogieron datos fisiológicos importantes para futuras misiones espaciales humanas. Por su parte, Gerardi supervisó tecnologías médicas en microgravedad, que pueden proveer conocimientos fundamentales para el desarrollo de tecnologías médicas en el espacio.
La misión duró cerca de una hora y alcanzó una altitud de 87 kilómetros, considerada por la FAA como el umbral del espacio. Durante el vuelo, que marcó el sexto de la empresa en seis meses, los astronautas pudieron disfrutar de aproximadamente tres minutos en microgravedad, proporcionando una experiencia incomparable además de valiosos datos científicos.
Este tipo de vuelos abre caminos hacia la democratización del acceso al espacio para investigación y turismo, haciendo realidad una era donde viajar al borde del espacio podría convertirse en algo tan común como tomar un vuelo transatlántico. La incorporación del conocimiento adquirido en Galactic 05 promete impulsar aún más las capacidades de la flota futura de Virgin Galactic.
Finalmente, el éxito de la misión Galactic 05 es un paso adelante en el compromiso de Virgin Galactic con la exploración y la ciencia espacial. Su oferta de vuelos regulares y accesibles promete cambiar la forma en que comprendemos y experimentamos el espacio exterior.