El 'Tendedero del Acoso' Revela Denuncias de Acoso y Abuso en el Colsan
En el Colegio de San Luis Potosí (Colsan), una ola de denuncias está sacudiendo los cimientos de la institución. Un proyecto estudiantil, conocido como el 'Tendedero del Acoso', está exponiendo casos de hostigamiento, acoso sexual, maltrato psicológico y abuso de poder, incluso señalando a figuras prominentes del feminismo local. Este movimiento, impulsado por la valentía de alumnas y trabajadoras, está generando un debate profundo sobre la cultura institucional y la necesidad de cambios estructurales.
El Origen del 'Tendedero del Acoso'
Según informes de Milenio, la iniciativa comenzó el 3 de marzo, cuando Lu Brizuela, estudiante de maestría en literatura hispanoamericana, instaló un tendedero improvisado frente a la biblioteca Rafael Montejano y Aguiñaga. Día tras día, nuevas denuncias se están sumando, transformando el espacio en un poderoso testimonio colectivo. Para el 7 de marzo, la lista ya incluye 12 hombres y cinco mujeres, acusados de diversas formas de abuso.
Nombres Señalados y Acusaciones Impactantes
Entre los nombres que están surgiendo en las denuncias, destaca el del Dr. Mauricio Genet Guzmán Chávez, acusado de robo de créditos de investigación y humillación a colegas. También está siendo señalado el Dr. José Armando Hernández Soubervielle, secretario académico, por presunto acoso sexual y misoginia. Sin embargo, lo que más está conmocionando a la comunidad es la inclusión de figuras reconocidas en el ámbito feminista, como la Dra. Oresta López Pérez, responsable de coordinar el diagnóstico de violencia contra las mujeres en el estado.
«Se jacta de ser feminista, pero en realidad es todo lo contrario», se lee en una de las denuncias contra la Dra. López Pérez. (Milenio, 2024)
Otras profesoras, como la Dra. Cecilia Costero, la Dra. Neyra Patricia Alvarado Solís y la Dra. Fuentesanta Medina Martínez, también están siendo señaladas por conductas de hostigamiento y abuso de poder.
La Respuesta Institucional y el Diálogo Urgente
Ante la magnitud del escándalo, el presidente del Colsan, Dr. David Eduardo Vázquez Salguero, está ofreciendo su oficina como espacio de escucha y apoyo. El 10 de marzo, se llevó a cabo un diálogo institucional con el objetivo de buscar soluciones. Durante más de dos horas, las voces de las personas silenciadas están resonando con fuerza, exigiendo justicia y reformas significativas.
Un Problema Preexistente y la Necesidad de Transformación
Este no es un problema nuevo. En 2020, el Colsan, en colaboración con la Conavim (Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres), presentó un estudio sobre la violencia contra las mujeres en San Luis Potosí, dirigido por la misma Oresta López Pérez. Los resultados ya indicaban que el 72.9 por ciento de las mujeres encuestadas estaban sufriendo violencia emocional o psicológica. Ahora, las denuncias están confirmando que el problema persiste dentro de la institución.
Lu Brizuela, estudiante de maestría, está destacando en una entrevista para Milenio, cómo el acoso laboral está afectando la salud mental de las mujeres. «Una constante en las mujeres que han sido acosadas, porque pues convivo con ellas e incluyéndome a mí, terminamos con atención mental, psicológica o psiquiátrica por el estrés de ser acosadas, sobre todo laboralmente». (Brizuela, 2024)
El Futuro del Colsan: ¿Hacia un Cambio Real?
Con un presupuesto de 130 millones de pesos para el ejercicio 2025, el Colsan enfrenta el desafío de demostrar un compromiso real con la erradicación de la violencia y la promoción de un ambiente seguro y respetuoso. La comunidad estudiantil y académica está esperando que las denuncias se traduzcan en una transformación profunda y duradera. Una de las primeras medidas adoptadas por la dirección es solicitar que las puertas de las oficinas permanezcan abiertas durante la atención a estudiantes y visitantes.
El 'Tendedero del Acoso' está siendo mucho más que un espacio de denuncia; se está convirtiendo en un catalizador para el cambio en el Colegio de San Luis Potosí. La pregunta ahora es si la institución estará a la altura del desafío y responderá con acciones concretas para garantizar la seguridad y el bienestar de toda su comunidad.
Según Claudia Solera (2024), periodista de Grupo Milenio, «El viento de marzo arrastró consigo un vendaval de verdades que por años se habían susurrado en el Colegio de San Luis Potosí». (Solera, 2024)
