El resurgimiento de la tos ferina: Una mirada a la situación actual

La tos ferina, una enfermedad respiratoria causada por la bacteria Bordetella pertussis, está mostrando un preocupante resurgimiento a nivel global. Desde la Edad Media, esta enfermedad ha sido una amenaza para la salud pública, y aunque una vacuna efectiva ha existido por décadas, los casos están nuevamente en aumento. Según un reciente informe de Grupo Milenio (Hernández, 2025), varios países, incluyendo México, Brasil, Estados Unidos y Perú, están experimentando un incremento en el número de casos, lo que ha generado alertas entre las autoridades sanitarias.

México en alerta por el aumento de casos

En México, el Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (Conave) ha emitido un aviso epidemiológico debido al incremento de casos de tos ferina. En 2023, se registraron 153 casos, pero en 2024 esta cifra se elevó a aproximadamente 443, lo que representa un aumento del 189.54%. Hasta la semana 7 de 2025, ya se habían confirmado 120 casos distribuidos en 21 estados, con 460 casos sospechosos adicionales. La situación ha generado preocupación, especialmente después de que un comediante neolonés compartiera el caso de su bebé recién nacida, quien se encontraba en estado delicado debido a la enfermedad (Hernández, 2025).

Un fenómeno global

El aumento de casos no se limita a México. La Oficina Regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha instado a los países de la región a estar alerta, tras la confirmación de 32,000 casos en la Unión Europea solo en los tres primeros meses de 2024 por el Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC). Este resurgimiento global plantea interrogantes sobre las causas subyacentes y las estrategias de prevención más efectivas.

¿Qué es la tos ferina y cuáles son sus síntomas?

La tos ferina es una enfermedad altamente contagiosa que afecta las vías respiratorias. Los síntomas iniciales son similares a los de un resfriado común: moqueo, congestión nasal, ojos enrojecidos, fiebre y tos leve. Sin embargo, después de una o dos semanas, los síntomas empeoran, manifestándose con episodios de tos violenta y rápida que terminan con un sonido característico similar a un «silbido». En casos graves, puede haber vómito, fatiga extrema e incluso una coloración azul en los labios y la lengua (Mayo Clinic, s.f.).

Según la Mayo Clinic, aunque adolescentes y adultos generalmente se recuperan sin mayores complicaciones, los bebés, especialmente los menores de 6 meses, son particularmente vulnerables. Incluso sin presentar tos, pueden experimentar dificultades respiratorias severas.

Las causas del resurgimiento

El aumento de casos de tos ferina es multifactorial. Históricamente, la vacuna contra la Bordetella pertussis ha sido una herramienta efectiva para controlar la enfermedad. Sin embargo, la disminución en las tasas de vacunación en ciertas comunidades ha contribuido al resurgimiento. Como señala Johns Hopkins Medicine (s.f.), el aumento de casos desde la década de 1980 se ha observado especialmente en niños y adolescentes de 10 a 19 años, y en bebés menores de 6 meses.

El impacto de la pandemia de COVID-19

La pandemia de COVID-19 también jugó un papel importante. Las medidas de aislamiento y distanciamiento social redujeron la exposición a diversos agentes infecciosos, incluyendo la Bordetella pertussis. En consecuencia, muchos países experimentaron una disminución significativa en los casos de tos ferina durante este período. Sin embargo, con el levantamiento de estas medidas, los brotes han vuelto a repuntar. El Dr. Víctor Gómez Bocanegra, epidemiólogo y profesor de la Facultad de Medicina de la UNAM, explica que la menor exposición a patógenos durante la pandemia hizo a los más pequeños más susceptibles a infectarse con virus contra los que no se habían inmunizado (Gaceta UNAM, 2024).

Prevención y tratamiento

La vacunación sigue siendo la principal medida de prevención contra la tos ferina. En México, se aplica la vacuna pentavalente acelular, que protege contra la difteria, tétanos, poliomielitis, influenza tipo B y, por supuesto, la tos ferina. Esta vacuna se administra en cuatro dosis a los 2, 4, 6 y 18 meses de edad.

¿Qué medidas se pueden tomar?

  • Asegurarse de que los niños estén vacunados según el esquema recomendado.
  • Mantener una buena higiene respiratoria, cubriendo la boca y la nariz al toser o estornudar.
  • Consultar a un médico ante la aparición de síntomas sospechosos.

Aunque el aumento de casos de tos ferina es motivo de preocupación, los expertos descartan que represente una amenaza pandémica. El índice de mortalidad se mantiene relativamente bajo, entre el 0.2 y el 1 por ciento por cada mil habitantes (Hernández, 2025). Sin embargo, es fundamental tomar medidas preventivas y buscar atención médica oportuna para proteger a los más vulnerables.

Referencias

  1. Gaceta UNAM. (2024). Expertos advierten sobre el resurgimiento de enfermedades respiratorias tras la pandemia. https://www.example.com/gacetaunam
  2. Hernández, L. (2025). Qué es la tos ferina y cómo se explica el incremento de casos ocasionados por la bacteria Bordetella pertussis. Milenio. https://www.milenio.com/ciencia-y-salud/aumentan-casos-bordetella-pertussi-tos-ferina
  3. Johns Hopkins Medicine. (s.f.). Pertussis (Whooping Cough). https://www.hopkinsmedicine.org/health/conditions-and-diseases/pertussis-whooping-cough
  4. Mayo Clinic. (s.f.). Tos ferina. https://www.mayoclinic.org/es/diseases-conditions/whooping-cough/symptoms-causes/syc-20378973