El cáncer colorrectal es el segundo tumor más frecuente en hombres y mujeres, después del de próstata y mama, respectivamente, y en España se diagnostican anualmente más de 44.000 nuevos casos. A pesar de estas cifras, se trata de un tipo de cáncer prevenible mediante la adopción de hábitos de vida saludables y la detección precoz, esta última fundamental para reducir la mortalidad.
Síntomas y diagnóstico
Los síntomas más comunes del cáncer colorrectal incluyen cambios en los hábitos deposicicionales, como estreñimiento o diarrea, a veces acompañados de sangre en las heces. En etapas más avanzadas, pueden aparecer fuertes dolores abdominales, cólicos y una pérdida de peso significativa.
El diagnóstico se confirma generalmente mediante una colonoscopia, que permite visualizar el interior del colon y el recto. Posteriormente, se realiza un estudio de extensión para determinar el grado de afectación del tumor y planificar el tratamiento adecuado.
Tratamientos personalizados
El tratamiento del cáncer colorrectal depende de varios factores, como el estadio del tumor y el estado de salud general del paciente. Las opciones terapéuticas incluyen cirugía, quimioterapia, radioterapia, terapias dirigidas e inmunoterapia.
En los últimos años, la medicina de precisión ha permitido desarrollar tratamientos personalizados según el perfil genético de cada tumor y paciente. Esto ha mejorado significativamente las expectativas de supervivencia, que superan el 90% en estadios precoces y se sitúan en torno al 50-70% en estadios más avanzados.
Prevención
La mejor manera de luchar contra el cáncer colorrectal es prevenir su aparición. Para ello, es esencial mantener una alimentación saludable, rica en frutas, verduras y fibra, y evitar el consumo de alcohol y tabaco. También se recomienda realizar ejercicio físico regularmente y mantener un peso adecuado.
Conclusión
El cáncer colorrectal es un problema de salud muy común, pero se puede prevenir en gran medida mediante la adopción de hábitos de vida saludables y la detección precoz. Los avances en medicina de precisión están permitiendo personalizar los tratamientos y mejorar las expectativas de supervivencia, brindando esperanza a los pacientes y sus familias.
