El sueño de Carmelamola, la artesana con síndrome de Down, se hace realidad en A Coruña

En el corazón de A Coruña, en el Mercado de San Agustín, Carmela Álvarez Rodríguez, una artesana con síndrome de Down, ha cumplido su gran sueño: abrir su propia tienda de joyas, Carmelamola.

Carmela comenzó su andadura en el mundo de la joyería a los 16 años, como una forma de entrenar su motricidad fina. Su pasión y talento no tardaron en brillar, y pronto fundó su propio negocio online, con el apoyo de su familia.

Pero Carmela siempre soñó con tener una tienda física, donde poder mostrar sus creaciones al público y compartir su pasión con el mundo. Y ese sueño se ha hecho realidad esta semana, con la inauguración de Carmelamola en el número 8C del Mercado de San Agustín.

Un espacio único lleno de ilusión

El local, de unos 10 metros cuadrados, ha sido decorado con mimo por Carmela y su familia. Las paredes están adornadas con obras de arte creadas por ella misma, y en el mostrador se pueden encontrar sus coloridas y originales joyas.

Carmela ha bautizado sus diseños con nombres fantásticos, algunos en gallego, otros en idiomas crípticos y mágicos. Cada pieza es única, creada con pasión y cariño.

Además de la tienda, Carmelamola también cuenta con un pequeño taller, donde Carmela crea sus joyas. Allí, rodeada de herramientas y materiales, da rienda suelta a su creatividad.

El apoyo incondicional de su familia

El camino de Carmela hasta llegar a este momento no ha sido fácil, pero siempre ha contado con el apoyo incondicional de su familia. Sus padres, Ana y Manuel, y su hermana menor, Sara, han estado a su lado en cada paso del camino.

“Es uno de los días más importantes de nuestras vidas”, confiesa Ana, visiblemente emocionada. “Carmela ha superado muchas barreras, y estamos muy orgullosos de ella”.

Un ejemplo de superación

La historia de Carmelamola es un ejemplo de superación y de que, con esfuerzo y pasión, todo es posible. Carmela ha demostrado que, pese a tener síndrome de Down, es capaz de alcanzar sus sueños.

Su tienda es un espacio lleno de ilusión y creatividad, donde Carmela puede compartir su amor por la joyería con el mundo. Y es un recordatorio de que, con el apoyo adecuado, las personas con discapacidad pueden lograr grandes cosas.

Carmela Álvarez Rodríguez, artesana con síndrome de Down, en la inauguración de su tienda de joyas Carmelamola en A Coruña
Carmela Álvarez Rodríguez, artesana con síndrome de Down, en la inauguración de su tienda de joyas Carmelamola en A Coruña. (Foto: El País)