Claudio Ptolomeo, el padre de la geografía moderna, vivió en el siglo II en Alejandría y escribió su famosa obra Geografía.

Las contribuciones de Ptolomeo a la cartografía

Ptolomeo desarrolló un mapamundi que describía un mundo mucho más pequeño que el que posteriormente descubrirían exploradores como Fernando de Magallanes. A pesar de sus limitaciones, sus aportaciones fueron fundamentales para el desarrollo de la cartografía.

Sus cálculos e ideas geográficas sirvieron de base para las expediciones de navegantes como Cristóbal Colón y Magallanes, aunque contenían errores sobre la circunferencia del planeta.

La influencia de Ptolomeo en la era de los descubrimientos

Durante la Edad Media, el mapa de Ptolomeo siguió siendo clave en la era de los grandes descubrimientos, cuando Europa comenzó a explorar nuevas rutas marítimas.

El descubrimiento del Nuevo Mundo y las expediciones por el Atlántico, en particular la primera circunnavegación de la Tierra realizada por Magallanes y Juan Sebastián Elcano, demostraron que el mapa ptolemaico tenía limitaciones significativas.

Sin embargo, su trabajo abrió las puertas a una revolución en la ciencia náutica y la creación de nuevas herramientas de navegación.

El legado de Ptolomeo

A medida que se realizaron más exploraciones, los mapas comenzaron a actualizarse rápidamente. Ptolomeo fue gradualmente reemplazado por cartógrafos que documentaron los nuevos descubrimientos.

La creación de mapas, como el de Juan de la Cosa, que representaba por primera vez el continente americano, marcó una nueva era en la historia de la cartografía.

El arte de la cartografía se perfeccionó durante los siglos XV y XVI, con la aparición de escuelas de náutica como la de Sevilla, liderando el avance en el conocimiento del mundo a través de instrumentos como la brújula y el astrolabio.

El legado de Claudio Ptolomeo como el padre de la geografía moderna sigue vivo hoy, y sus contribuciones a la cartografía sentaron las bases para nuestra comprensión del mundo.