El Constitucional admite su error al no impulsar la renovación del CGPJ
El Tribunal Constitucional ha reconocido su error al no haber impulsado la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y ha admitido la corrección del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) por su "inacción" ante la falta de acuerdo entre los partidos políticos.
Un reconocimiento tardío
El reconocimiento del Constitucional llega después de que seis jueces presentaran un recurso alegando que sus derechos fundamentales habían sido vulnerados por el retraso en la renovación del CGPJ, una situación que se prolongó durante cinco años.
El TEDH dio la razón a los jueces y corrigió al Constitucional, que había archivado su queja por considerar que había llegado fuera de plazo. El tribunal europeo estimó que el Parlamento español tenía la obligación de poner en marcha el procedimiento para renovar el Poder Judicial, aunque luego la falta de acuerdo entre los partidos retrasara la elección de los nuevos vocales.
El Constitucional reconoce el fallo, pero no entra en el fondo
Ahora, el Constitucional ha admitido el fallo del TEDH, pero ha evitado entrar en el fondo del asunto y revisar si debería haber actuado de otro modo ante la relevancia del recurso de los jueces. El tribunal ha alegado que, una vez renovado el CGPJ, ya no procede "apreciar la pervivencia de la de controversia de fondo".
Sin embargo, el Constitucional ha advertido que la advertencia queda hecha para el futuro, si se repite una situación similar. El tribunal ha subrayado que "no cabe carencia de todo efecto interno de la declaración realizada por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos sobre la existencia de la infracción de un derecho reconocido en el Convenio".
Un precedente para el futuro
La decisión del Constitucional sienta un precedente para el futuro y recuerda la obligación de los poderes públicos de garantizar el buen funcionamiento de las instituciones. El tribunal ha reconocido que su "inactividad u omisión" en el caso de la renovación del CGPJ vulneró los derechos de los recurrentes y ha advertido de que no volverá a tolerar situaciones similares.
El reconocimiento del Constitucional es un paso adelante en la defensa del Estado de derecho y un mensaje claro a los poderes públicos de que deben cumplir con sus obligaciones y garantizar el funcionamiento de las instituciones.