El discurso racista y xenófobo vuelve a colarse en unas fiestas patronales
La localidad de Cascante (Navarra), de 4.000 habitantes, celebró el pasado domingo su habitual misa en la basílica del Romero con motivo de los festejos locales. Con la iglesia abarrotada, el sacerdote navarro Jesús Planillo Bartos, agustino recoleto, inició su homilía hablando de la familia y de la importancia de la figura maternal. Sin embargo, sus palabras pronto derivaron hacia un discurso racista y xenófobo que ha generado una gran polémica.
'Los musulmanes están invadiendo nuestras iglesias'
Planillo comenzó hablando de que había estado en sus parroquias de Andalucía y que había vuelto con pena porque había visto que el 40% de la población era musulmana y que esto estaba provocando que las iglesias se vaciaran. "No tengo nada contra los musulmanes, pero resulta que a los actos religiosos, cuando antes se llenaba la iglesia, ahora, en un pueblo tan grande, hay cuarenta personas el domingo. Es lamentable, ¿verdad?", aseguró.
El sacerdote continuó diciendo que "familias enteras se van de los barrios porque realmente no pueden vivir. ¿Por qué? Porque los poderes públicos dan toda clase de facilidades a los inmigrantes, que me parece muy bien. ¿Y los nacionales?". Estas palabras provocaron un gran revuelo entre los asistentes a la misa, que comenzaron a murmurar y a mostrar su disconformidad.
Reacciones de condena
Las palabras de Planillo han generado una gran polémica y han sido condenadas por numerosas figuras públicas, entre ellas el portavoz de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Javier Esparza, que estuvo presente en la misa. "Fueron unas palabras total y absolutamente desafortunadas que no compartimos muchos de los que estábamos allá. Creo que se equivocó", aseguró Esparza.
También se ha expresado en contra el portavoz socialista, Ramón Alzórriz, que ha asegurado que "son discursos que dan asco". "Asco la xenofobia, asco el racismo, se tiene que acabar con esos discursos de odio", añadió.
Por su parte, desde Contigo-Zurekin, Carlos Guzmán ha manifestado su preocupación por "esos discursos de odio, por ese discurso racista y xenófobo cada vez más preponderante en nuestra sociedad".
Vox defiende al sacerdote
Sin embargo, no todas las reacciones han sido de condena. La portavoz parlamentaria de Vox Navarra, Maite Nosti, ha seguido la línea del párroco y ha vinculado el aumento de ilícitos denunciados durante el verano con la inmigración irregular. "La mayoría de estos delitos han sido cometidos por inmigrantes ilegales y esto no es racismo", aseguró Nosti.
Nosti también cargó contra el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, por haber invitado, según asegura, a 250.000 mauritanos a venir a trabajar al territorio nacional. "Sin considerar que los tenemos que mantener, claro. Son personas en su mayoría musulmanas, con lo que conlleva; con un 40% de analfabetismo, lo que nos faltaba; que practican la ablación femenina, ale; ven a las mujeres como objetos y matan a los homosexuales", afirmó.
Las palabras de Nosti han sido también condenadas por numerosas figuras públicas, que han acusado a Vox de "alimentar el discurso del odio" y de "utilizar la inmigración como chivo expiatorio".