El Supremo investiga al fiscal general por la filtración de un email

El Tribunal Supremo ha decidido investigar al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por la posible filtración a la prensa de un correo electrónico enviado al ministerio público por la defensa de Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso (PP), presidenta de la Comunidad de Madrid.

Inicio del caso

A principios de marzo, la Fiscalía de Madrid presentó una denuncia contra González Amador por urdir una trama de facturas falsas para defraudar más de 350.000 euros a Hacienda. En respuesta, Ayuso y su equipo difundieron el bulo de que el ministerio público le había ofrecido un pacto, lo que fue desmentido por el propio abogado de González Amador, quien había sido el que inició las negociaciones más de un mes antes.

La nota de prensa de la Fiscalía

Ante las mentiras difundidas por el equipo de Ayuso, la Fiscalía emitió una nota de prensa aclarando que la iniciativa de intentar un pacto había partido de González Amador. Sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) aceptó la querella del novio de Ayuso y abrió una causa contra la Fiscalía por considerar que la difusión de dicha nota de prensa podía implicar una revelación de secretos.

El Supremo echa por tierra la tesis del TSJM

El Supremo ha echado por tierra la tesis del TSJM y ha concluido que la nota de prensa de la Fiscalía "no" incluye, "aparentemente, información indebidamente revelada ante el conocimiento público de los hechos". Sin embargo, el alto tribunal ha decidido investigar al fiscal general por considerar que los correos entre el fiscal Julián Salto y el abogado de González Amador fueron revelados a la prensa horas antes de que se publicara la nota de prensa oficial, cuando esos emails estaban ya en poder del fiscal general y de la fiscal jefa provincial.

¿Quién filtró el correo?

La clave del caso se sitúa ahora en quién filtró esos emails. La Fiscalía ha defendido que no existen indicios que apunten a miembros del ministerio público con más intensidad de los que puedan señalar a otras decenas de personas que pudieron tener acceso a ellos. El ministerio público ha puesto sobre la mesa que muchas personas pudieron acceder a esos correos, entre ellas el abogado de González Amador, fiscales, funcionarios y miembros del entorno de Ayuso y su pareja.

El Supremo se encuentra investigando para determinar quién filtró los correos y si el fiscal general tuvo alguna implicación en ello.