El PP sospecha de la salida de la responsable de Emergencias: "Si cae la consejera, el siguiente es Mazón"

El Partido Popular (PP) duda de la destitución de la consejera de Interior, Salomé Pradas, en caso de que dimita el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón. Fuentes del partido consideran que la consejera actúa como "escudo" del presidente y aseguran que este debe "aguantar" las críticas.

Varios dirigentes del PP admiten que "ni a Camps" se le amortizó tan rápidamente, en referencia al expresidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, quien dimitió tras ser imputado por la trama Gürtel.

La oposición pide responsabilidades

La petición de responsabilidades se cierne tanto sobre el presidente Mazón como sobre la consejera Pradas desde que esta última admitiera públicamente que desconocía la existencia de un sistema de envío de alertas a los móviles para avisar a la población ante emergencias.

Fuentes del PP señalan que "si cae la consejera, el siguiente es él" (Mazón), ya que admitir errores implicaría responsabilizar también al presidente.

Posibles caídas en cascada

Otras fuentes sostienen que "lo más probable" es que dimitan el secretario autonómico de Emergencias, Emilio Argüeso, o el director general del ramo, Alberto Javier Martín, aunque ninguno ha tenido un papel destacado en la gestión de la crisis.

No obstante, apuntan que dentro de tres meses el presidente podría plantearse una remodelación del Gobierno y prescindir de todos ellos.

Mazón, obligado a aguantar

A pesar de las críticas internas y externas, las fuentes consultadas coinciden en que Mazón debe "aguantar" y dirigir las labores para paliar las consecuencias de la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que ha asolado la Comunidad Valenciana.

Consideran que dimitir ahora sería un error, ya que también implicaría la dimisión del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, al que también atribuyen responsabilidad en la gestión de la crisis.

Obstáculos para sustituir a Mazón

Además, aun en el caso de que el PP presionara para que Mazón abandonara la presidencia, existe un obstáculo: para dirigir el Gobierno valenciano es necesario ser diputado, y ninguno de los miembros del Consell lo es actualmente.

Entre los diputados restantes, apenas hay figuras con el suficiente carisma y peso político para liderar un gobierno autonómico sin generar contestación interna, a excepción de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá.

Sin embargo, Catalá ha evitado aparecer junto a Mazón en las zonas afectadas por la DANA, lo que sugiere su intención de no asumir las responsabilidades políticas de la crisis.

Mazón, tocado pero no hundido

En cualquier caso, la mayoría de las fuentes consultadas admiten que Mazón está tocado y que, aunque supere esta crisis, "ha caído en desgracia".

Recuerdan que nunca antes se había "amortizado" a un presidente tan rápidamente y comparan su situación con la de Francisco Camps, quien dimitió poco después de ser imputado por la trama Gürtel.

Probablemente, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, tampoco olvida que Mazón tardó 48 horas en anunciar un acuerdo con Vox para gobernar la Generalitat, antes de las elecciones generales, tal y como hicieron otros barones del PP en sus territorios.