Enfrentamiento entre Gendarmería y cocaleros en Salta: un muerto y 53 heridos

La Gendarmería Nacional protagoniza un enfrentamiento con un grupo de cocaleros en el norte de Salta, en el límite con Bolivia. El saldo del operativo es de un muerto y 53 heridos.

El hecho

El hecho ocurrió en el puesto 28, en la zona de Orán, donde los efectivos policiales protagonizaron una batalla campal con los bagayeros, quienes habitualmente cruzan por allí con distintos elementos de manera ilegal para comercializarlos en Salta.

El personal de la Gendarmería intervino en el marco del denominado Plan Güemes, ideado por el Ministerio de Seguridad para combatir el narcotráfico, el contrabando, la trata de personas y el sicariato en esa región.

Desde el entorno de los bagayeros, dejaron entrever que los incidentes habrían sido impulsados por un grupo de narcotraficantes para pasar sustancias prohibidas por la frontera, en medio del caos generalizado.

Como consecuencia del enfrentamiento, 53 personas terminaron con heridas de distinta gravedad y Fernando Martín Gómez, de 27 años, falleció tras ser alcanzado por un disparo de los efectivos.

Reacciones

El diputado del Frente de Izquierda, Nicolás del Caño, repudió el accionar policial y expresó: ¡Justicia por Fernando Gómez! En un humilde pueblo de Orán (Aguas Blancas), miles de pobladores se levantaron contra la represión de la gendarmería asesina de Bullrich y Milei que junto al gobernador de Salta militarizaron la zona con el Plan Güemes. No combaten a ningún narco, son asesinos de trabajadores.

Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, había anunciado días atrás la llegada del Plan Güemes cuyo objetivo es darle un golpe certero al narcotráfico y a la trata.

Según precisó la funcionaria, el plan apunta a fortalecer los controles fronterizos y establecer una clara gestión de control vecinal para lograr que haya una verdadera administración aduanera.

¿Quién era Fernando Gómez?

Fernando Gómez era padre de tres hijos y habitante de una precaria vivienda en el barrio Libertad.

No era un narcotraficante, vendía hojas de coca para mantener a la familia, aseguraron sus allegados durante el sepelio.

Fernando solo buscaba ganarse la vida, no merecía este final, dijo una prima del joven a la prensa local.