¡Hacer cola es el nuevo ocio en Madrid!
Parece que hacer cola se ha convertido en el nuevo pasatiempo favorito de los madrileños. Ya sea para comprar tomates en el mercado de productores, pedir un New York Roll de pistacho en el restaurante de moda o subir a la azotea de un hotel, las colas son cada vez más habituales en la capital.
¿Por qué hacemos cola?
Las razones para hacer cola son diversas. Algunas personas lo hacen para conseguir un producto o servicio que está de moda, mientras que otras lo hacen simplemente para socializar.
En el caso del mercado de productores, las colas se deben a la gran afluencia de gente que busca productos frescos y de calidad. El mercado es tan popular que los fines de semana es casi imposible entrar sin hacer cola.
En el caso de los restaurantes, las colas se suelen deber a la falta de reservas. Muchos restaurantes de moda no aceptan reservas, por lo que los clientes tienen que hacer cola para conseguir una mesa.
Y en el caso de las azoteas de los hoteles, las colas se deben a la espectacularidad de las vistas. Madrid tiene algunas de las mejores azoteas del mundo, y los turistas y los madrileños están dispuestos a hacer cola para disfrutarlas.
¿Cómo hacer cola correctamente?
Hacer cola es todo un arte. Hay que saber esperar pacientemente, sin desesperarse. También hay que estar atento a los demás y asegurarse de que nadie se cuela.
Algunas personas tienen trucos para hacer cola más amena. Por ejemplo, hay quien lleva un libro para leer o un móvil para ver una película. Otros prefieren charlar con los demás que están haciendo cola.
También hay quien opta por hacer cola de forma más activa. Por ejemplo, hay quien aprovecha para hacer ejercicio o para tocar música.
El lado positivo de hacer cola
Aunque hacer cola puede ser molesto, también tiene su lado positivo. Por ejemplo, hacer cola puede ayudar a socializar. Al estar esperando junto a otras personas, se pueden entablar conversaciones y conocer gente nueva.
Además, hacer cola puede ayudar a valorar las cosas más. Cuando se tiene que esperar para conseguir algo, se suele apreciar más cuando se obtiene.
Así que, la próxima vez que tengas que hacer cola, no te desesperes. Aprovecha la oportunidad para socializar, para leer un libro o simplemente para disfrutar del momento.