La FDA aprueba un nuevo medicamento de Eli Lilly para frenar el alzhéimer

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos ha aprobado el uso de donanemab, un nuevo fármaco de Eli Lilly, para el tratamiento temprano del alzhéimer. El medicamento, que se comercializará con el nombre de Kinsula, ha demostrado ralentizar el declive cognitivo y funcional hasta en un 35 % en la fase final de los ensayos clínicos.

Cómo actúa Kinsula

Donanemab actúa sobre las placas amiloides, que se forman por la acumulación de proteínas producidas naturalmente por el cuerpo y que están relacionadas con el alzhéimer, el párkinson y otras enfermedades neurológicas. La acumulación excesiva de placas amiloides en el cerebro provoca pérdida de memoria y otros problemas asociados al alzhéimer.

Indicaciones y coste

La FDA ha autorizado el uso de Kinsula para adultos con alzhéimer sintomático temprano, incluidos aquellos con deterioro cognitivo moderado y pacientes con demencia leve causada por el alzhéimer.

El coste del tratamiento con Kinsula es de 12.522 dólares por seis tratamientos en seis meses, 32.000 dólares por 13 tratamientos en 12 meses y 48.696 dólares por 19 tratamientos en 18 meses.

Otros tratamientos para el alzhéimer

Kinsula es el segundo tratamiento aprobado por la FDA en los últimos meses para el alzhéimer. El año pasado, el organismo federal autorizó el uso de lecanemab, un fármaco contra el alzhéimer de las farmacéuticas japonesas Eisai y estadounidenses Biogen, que se comercializa con la marca Leqembi.

Prevalencia e impacto del alzhéimer

El alzhéimer es una enfermedad neurodegenerativa irreversible que afecta a aproximadamente 6,7 millones de estadounidenses mayores de 65 años. Según la Alzheimer Disease International, más de 55 millones de personas en todo el mundo padecen demencia, y entre el 60 % y el 70 % de ellas sufren alzhéimer.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el coste económico de la demencia ascendió a 1,3 billones de dólares en 2019 y que el número de personas con la enfermedad aumentará a 139 millones en 2050.