La Floralis Genérica, símbolo de Buenos Aires, inicia su reparación

Tras los daños sufridos por dos temporales en diciembre y marzo, la icónica escultura de la Floralis Genérica emprende su proceso de restauración. El Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana porteño está llevando a cabo un operativo de "alta complejidad" que comenzó el pasado 14 de mayo y culminará el domingo 19.

Traslado de los pétalos

Este jueves, los dos pétalos caídos fueron cuidadosamente desmontados con el objetivo de evitar daños en el mecanismo de apertura. De acuerdo con los estudios previos, la maquinaria que abre y cierra la flor aún funciona correctamente.

El traslado de los pétalos está previsto para este domingo al predio de infractores de tránsito de la Secretaría de Transporte, ubicado detrás de la Facultad de Derecho. Allí continuarán los estudios técnicos para su reparación.

Evaluación de los daños

A fines de enero, bajo la supervisión del MOA (Monumentos y Obras de Arte de la Ciudad), comenzaron los trabajos de diagnóstico sobre los daños generados. Estos estudios permitieron mostrar el estado de situación general y proyectar su posterior reparación.

El análisis incluyó la apertura de las láminas de los pétalos de acero, el análisis de la estructura para evaluar daños internos y la revisión de los componentes electromecánicos y electrohidráulicos.

Antecedentes y contexto

Inaugurada el 13 de abril de 2002, la Floralis Genérica es una escultura de 20 metros de altura y 18 toneladas de peso que rinde homenaje a todas las flores. Fue la primera escultura con movimiento controlada por un sistema hidráulico y células fotoeléctricas que respondían a la luminosidad del día.

Sin embargo, desde su inauguración, la Floralis Genérica ha presentado problemas de funcionamiento. En 2009, un temporal también provocó la caída de un pétalo. En 2015, la obra fue reinaugurada con el sistema de cierre y apertura reparado, aunque solo se podía controlar manualmente.

Un proyecto de reparación eficiente y sostenible

El ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, Ignacio Baistrocchi, destacó que el proceso de reparación se llevará a cabo "teniendo en cuenta la situación económica y las consecuencias del cambio climático".

El objetivo es concretar un proyecto de reparación eficiente, austero y sostenible en el tiempo. Para ello, se utilizarán los planos originales conservados por FAdeA (Fábrica Argentina de Aviones SA), que había participado del montaje original de la Floralis.