La Mesa del Parlament habilita agosto para una investidura fallida
La Mesa del Parlament de Cataluña ha decidido este martes que la institución podrá activarse para celebrar una sesión de investidura la primera quincena de agosto, aunque normalmente esas dos semanas se consideran periodo no hábil. Con esta medida, el órgano rector de la Cámara ha descartado la posibilidad de que los grupos cierren un pacto tácito de no firmar ningún acuerdo entre el 8 y el 18 de agosto para poder irse de vacaciones.
El reloj empieza a correr
La Cámara visualizará este miércoles con un breve y veloz pleno de apenas 45 minutos esa investidura fallida en la que se escenificará que empieza a correr el reloj de una posible repetición electoral si los grupos no alcanzan un acuerdo antes del 26 de agosto incluido.
PSC y Junts, los más optimistas
El PSC reivindica que es el único que puede aunar la mayoría de 68 escaños mientras Junts esgrime que la suya es la más “operativa” porque la suma de los escaños independentistas (59) supera a los de la alianza entre PSC y comunes (48).
ERC, con la llave
ERC, que tiene la clave, usará su turno de palabra para remarcar la idea que defiende desde la noche electoral: que son los socialistas y los de Puigdemont quienes tienen que mover ficha para formar Govern, aunque ahora les ve con interés en forzar una repetición electoral.
Todos los partidos pronostican que el debate para elegir president, si lo hay, se celebrará al límite y a final de agosto
No es la primera vez que sucede algo así en la Cámara catalana. El expresident Carles Puigdemont fue investido en 2016 justo cuando se agotaba el periodo un domingo 10 de enero en una jornada que se habilitó al ser en periodo no hábil.
La Mesa estudiará el impacto entre la plantilla de trabajadores por si deben estar de guardia
La Mesa estudiará ahora el impacto que tendrá su decisión entre la plantilla de trabajadores por si deberán estar de guardia en el caso de que se convoque el Pleno.
Los grupos modifican y actualizan los baremos para adjudicar cargos en el Parlament
Por lo pronto, el legislativo catalán sigue con su vida orgánica, sin tener claro si la legislatura avanzará. La Mesa ampliada, integrada por todos los grupos de la Cámara, ha decidido este lunes también modificar y actualizar los baremos para adjudicar los cargos de los grupos parlamentarios.
En total, se distribuirán 36 puestos -dos más de los que había en la actualidad- y el Parlament aumentará el gasto mensual en 2.739 euros y en total al año en 38.354 euros.
La distribución se hace en función de los cargos de presidente de grupo (2.936 euros de suplemento al mes), portavoz (2.803 euros euros), portavoz adjunto (1.847) y dirección, equivalente al portavoz “c” (1.369 euros).
PSC y Junts, los dos únicos con más de 30 diputados, tendrán 10 cargos -antes tenían 8- mientras ERC pasa de ocho a siete pese a haber perdido 15 escaños. El PP tendrá tres -pasa de un portavoz a dos- mientras Vox y los comunes mantendrán tres.
Quien se queda sin cargos es la CUP, que pierde los tres que tenía. Aliança Catalana (AC), que debuta esta legisaltura, no tendrá ninguno.
Los anticapitalistas, con cuatro escaños, se han constituido en subgrupo para no tener que convivir con AC, en sus antípodas ideológicas, y tener un poco más de autonomía.
La CUP no renuncia a que, finalmente, ERC o Junts le ceda un diputado para disponer de grupo propio.