Obesidad: Un cambio en el diagnóstico para una mejor atención
La evaluación de la obesidad ha estado dominada por el índice de masa corporal (IMC) durante casi dos siglos. Sin embargo, un nuevo consenso de expertos busca complementar el IMC con una relación cintura-altura para mejorar el diagnóstico de esta afección.
El IMC: Una medida obsoleta
El IMC, creado en el siglo XIX, no fue diseñado originalmente para medir la obesidad, sino para estudiar las proporciones del hombre blanco europeo. A pesar de su antigüedad, el IMC ha seguido siendo el estándar de oro para el diagnóstico de la obesidad, aunque sus limitaciones son cada vez más evidentes.
La revolución de la relación cintura-altura
El nuevo enfoque propuesto por la Asociación Médica Estadounidense (AMA) y la Asociación Europea para el Estudio de la Obesidad (EASO) incorpora la relación cintura-altura en el diagnóstico de la obesidad. Esta medida refleja el exceso de tejido adiposo visceral, un factor de riesgo de enfermedades cardiometabólicas.
Ventajas del nuevo enfoque
- Mejor diagnóstico: La relación cintura-altura permite identificar a más personas con obesidad que el IMC.
- Tratamiento más preciso: El nuevo enfoque guía tratamientos más personalizados según el riesgo individual.
- Prevención de enfermedades: El diagnóstico temprano de la obesidad permite intervenciones preventivas para reducir el riesgo de enfermedades crónicas.
Retos y limitaciones
- Listas de espera más largas: El diagnóstico más preciso podría aumentar las listas de espera para los servicios de atención de la obesidad.
- Cobertura limitada del tratamiento: Los fármacos para la obesidad no están cubiertos por la Seguridad Social en algunos países, lo que limita el acceso.
- Falta de formación: Los profesionales de la salud deben recibir capacitación sobre el nuevo enfoque de diagnóstico.
El futuro de la gestión de la obesidad
El consenso sobre el diagnóstico de la obesidad es un paso crucial hacia una mejor gestión de esta afección. La incorporación de la relación cintura-altura junto con el IMC permitirá un diagnóstico más preciso, tratamientos más personalizados y mejores resultados de salud para millones de personas que viven con obesidad.
Expertos respaldan el nuevo enfoque
Los especialistas en endocrinología y nutrición han acogido con satisfacción el nuevo enfoque. Gemma Frühbeck, de la Clínica Universidad de Navarra, destaca que el cambio "es radicalmente diferente a lo que se hacía hasta ahora" y permitirá una "medicina de precisión más moderna".
Llamado a la acción
Los expertos instan a los profesionales de la salud a adoptar el nuevo enfoque de diagnóstico para mejorar la atención de la obesidad. También hacen un llamado a los responsables políticos para garantizar el acceso a tratamientos eficaces y reducir las barreras al diagnóstico y la atención.