Las esposas de yihadistas negociando un pacto con la Fiscalía española
Las dos españolas repatriadas de Siria, Yolanda Martínez y Luna Fernández, acusadas de pertenecer a una organización terrorista, están negociando un acuerdo con la Fiscalía de la Audiencia Nacional. El pacto supondría una reducción de las penas de cárcel solicitadas por el ministerio público, que inicialmente pedía seis años de prisión para cada una de ellas.
Acuerdo para reducir las penas
El acuerdo permitiría a las mujeres reducir las penas de cárcel que la Fiscalía solicita para ellas. Según fuentes jurídicas, el ministerio público estaría dispuesto a rebajar la petición a cambio de que las acusadas reconozcan los hechos y los delitos que se les imputan.
Conversaciones con la Fiscalía
Los abogados de las españolas están manteniendo conversaciones con la Fiscalía para tratar de alcanzar un pacto de conformidad. Estas conversaciones se enmarcan dentro de la actividad habitual de la Fiscalía, que suele negociar acuerdos en juicios sobre yihadismo.
Libertad provisional
Yolanda Martínez y Luna Fernández fueron repatriadas en enero de 2023 desde el norte de Siria junto a los 13 niños que tenían a su cargo. Tras permanecer casi un año y nueve meses en prisión provisional, quedaron en libertad la pasada semana después de que la Audiencia Nacional acordara su excarcelación al considerar que sus “circunstancias” habían variado y que “no había riesgo de fuga”.
Delito de integración en organización terrorista
En su escrito de acusación, la Fiscalía atribuye a las dos mujeres un delito de integración en organización terrorista. El ministerio público sostiene que Fernández y Martínez se desplazaron “voluntariamente” a la “zona de conflicto sirio-iraquí junto a sus maridos” para integrarse al Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés): “Compartiendo y aceptando el mismo destino de ellos”.
Papel destacado en el ISIS
Según la Fiscalía, las dos acusadas tuvieron un papel “destacado”, “clave” y de “liderazgo” dentro del grupo de las esposas de los componentes de la Brigada Al Andalus, una célula yihadista desarticulada en 2014. En Siria, una de ellas ayudaba y soportaba la actividad de su esposo, miembro de un tribunal yihadista dentro del Estado Islámico, mientras que la otra ayudaba y soportaba la actividad de su esposo, combatiente en las filas del grupo terrorista.
Interiorización de una visión radical del islam
La Fiscalía sostiene que las investigadas siempre mostraron su voluntad de ser miembros del Daesh y que solo la pérdida de control territorial en Siria e Irak, así como las condiciones de vida en el campo de acogido de Al Hawl, les llevaron a solicitar su repatriación a España.
Declaraciones de las acusadas
En una entrevista concedida a EL PAÍS en 2019, Fernández afirmó: “Yo soy musulmana y no voy a renegar de mi religión. Y como muchos países hacen sus leyes, Alá ha hecho una ley y él sabe, nosotros no sabemos”. Por su parte, Yolanda Martínez declaró: “Llegó sin saberlo. Pero estaba muy contenta. Nos dieron una casa y a mi marido un trabajo en el juzgado del ISIS, haciendo recados. Por fin tuvimos una situación estable económica”.
Argumentos de la defensa
Los abogados de las acusadas mantienen que no existen pruebas suficientes contra ellas. Consideran que enamorarse de una persona no convierte a alguien en cómplice de sus actos.
Beneficios del pacto
Según fuentes del entorno de ambas mujeres, alcanzar un pacto con la Fiscalía alejaría el riesgo de que un tribunal las condenase a altas penas y reduciría la posibilidad de que volvieran a la cárcel tras haber pasado ya un año y nueve meses en prisión preventiva.