Carencias nutricionales: Cinco signos que debes reconocer

Si te preguntas por qué te sientes cansado constantemente o por qué te enfermas con frecuencia, puede ser el momento de analizar tu dieta. Aunque cumplas religiosamente con las cinco porciones diarias de frutas y verduras recomendadas, es posible que tu organismo no reciba todos los nutrientes esenciales que necesita.

"La falta de nutrientes esenciales puede provocar fatiga, debilidad muscular, baja energía y problemas inmunológicos recurrentes."

- Dra. Sarah Brewer, médica general y nutricionista

La nutricionista Melissa Snover, fundadora de Nourished, agrega: "Uñas y cabello quebradizos, problemas de piel y acné en adultos son indicadores de un desequilibrio nutricional."

Causas de las carencias nutricionales

Existen múltiples razones que explican la falta de vitaminas y minerales esenciales. Una de ellas es la disminución del valor nutricional de muchos alimentos debido a las técnicas de agricultura intensiva. Un estudio realizado en Estados Unidos mostró que ciertos cultivos tienen hasta un 38 % menos nutrientes que en el siglo pasado.

Además, nuestros hábitos alimenticios también juegan un papel crucial. La dependencia de alimentos procesados reduce el consumo de vitaminas y minerales esenciales. Aunque los alimentos orgánicos pueden tener mayores niveles de ciertos nutrientes, su costo suele ser una barrera para muchas familias.

Según la Dra. Brewer, las dietas restringidas también contribuyen a estas deficiencias: "Si eres vegano, podrías tener dificultades para obtener vitaminas B y hierro".

Síntomas de carencias nutricionales

  1. Úlceras bucales: Grietas en las comisuras de la boca o úlcera recurrente. Deficiencias comunes: Hierro, zinc y vitaminas B (B1, B2, B6).

  2. Uñas y cabello quebradizos: Pérdida de cabello, cabello frágil y uñas blandas o descoloridas. Deficiencias comunes: Biotina (B7), hierro y vitaminas A, C y E.

  3. Piel escamosa: Piel seca, 'piel de gallina', caspa o dermatitis seborreica. Deficiencias comunes: Vitaminas A, D, C, niacina (B3) y zinc.

  4. Fatiga y dolores musculares: Cansancio persistente, debilidad muscular y articulaciones doloridas. Deficiencias comunes: Hierro, vitamina D y B12.

  5. Sistema inmunológico debilitado: Resfriados frecuentes o infecciones recurrentes. Deficiencias comunes: Zinc, vitamina C y D.

Prevención de las carencias nutricionales

Prevenir las deficiencias nutricionales comienza con una dieta equilibrada y variada. La dieta mediterránea, rica en vegetales, granos integrales, pescado y aceite de oliva, es una excelente opción para garantizar un buen aporte de nutrientes. Consulta a un profesional de la salud para realizar chequeos regulares y asegurarte de que tu cuerpo reciba todo lo que necesita.