El Ayuntamiento de Madrid aparta a los vecinos de Vicálvaro de la decoración de su cabalgata de Reyes

Los vecinos del distrito de Vicálvaro están organizando su propia cabalgata de Reyes Magos desde hace más de medio siglo. Alquilaban camiones, los decoraban, elegían las vestimentas de los Reyes y el tipo de caramelos que se iban a lanzar. De un tiempo a esta parte, el Ayuntamiento de Madrid subcontrata a una empresa privada para que se encargue del evento en cada uno de los distritos.

También en Vicálvaro, pero hasta este año, daba libertad creativa a los vecinos de allí para decorar las carrozas. Ahora ya no. El Consistorio ha dejado esas decisiones en manos de la empresa que gestiona el evento. Las asociaciones de allí consideran que eso destruye la esencia de su tradición y han organizado su propia cabalgata extraoficial gracias a la financiación de las donaciones y a un permiso de manifestación de la delegación de Gobierno para cortar las calles.

“No la queremos llamar cabalgata alternativa, porque es la que hemos hecho siempre”, señala Alberto Vaquero (de Madrid, 37 años), coordinador del evento.

Vaquero resume en tres motivos el descontento de los vecinos del distrito. El primero es el cambio de fecha. La cabalgata organizada por el Ayuntamiento se celebrará el día 4 de enero esta vez, cuando la tradición es hacerla la noche del 5 de enero. Por eso, los vecinos van a celebrar su propia cabalgata en la fecha en la que lo han hecho siempre, la Noche de Reyes. Según Vaquero, lo que el Consistorio está buscando con esto es hacer “que luzca la [cabalgata] del centro”, que sí se celebrará ese día. El Ayuntamiento asegura que la decisión no tiene nada que ver con eso, sino con que no hay suficientes policías municipales para estar en ambos desfiles a la vez.

El segundo motivo de descontento vecinal es el cambio de modelo. “Hemos pasado de que el Ayuntamiento facilitara camiones para que las entidades vecinales pudieran hacer sus carrozas a que nos manden carrozas ya hechas desde una empresa”, resume. Cuenta que el año pasado hubo 19 camiones con el doble de capacidad de la que tienen las 11 carrozas que mandarán este año, tres de ellas reservadas para los Reyes Magos. “Muchos vecinos se han quedado sin poder participar”, denuncia. Desde el Consistorio defienden que han dado la oportunidad de participar a todas las asociaciones del distrito, aunque son conscientes de que no hay carrozas para todos. A los que no les ha tocado una por sorteo, les han ofrecido participar a pie.

El tercer motivo es la decoración impuesta. “El diseño es prefabricado y a veces no tiene nada que ver con la Navidad”, explica Vaquero. Sin embargo, el principal argumento que ha dado el Ayuntamiento a la hora de cambiar el modelo es ese. Dicen que lo hacen para asegurarse de que la estética del desfile respeta el espíritu navideño. “No hay que olvidar que los protagonistas de la cabalgata son los niños”, señala una portavoz del gobierno municipal. “Pensando en ellos, se ha optado por un diseño más estético con carrozas de fantasía”.

Algunos vecinos, como Vaquero, ponen esto en duda: “nos han puesto una [carroza] que es un barco pirata. Creemos que la están reciclando de un Carnaval”.

El barco pirata se está convirtiendo en un clásico de las Navidades en Madrid. También tendrán uno los vecinos de Usera. Ese distrito fue uno de los primeros en los que se dejó la organización de la cabalgata en manos privadas cuando José Luis Martínez-Almeida llegó a la alcaldía en 2019. A diferencia de los vecinos de Vicálvaro, allí están muy satisfechos con el cambio, según cuenta Alma López, miembro de la directiva de la Asociación de Vecinos del Barrio Moscardó. “Para nosotros ha sido un agobio menos”, explica. “antes nos daban un camión pelado para que lo decorásemos y éramos nosotros los que elegíamos los disfraces. Ahora se sortean las carrozas que ya vienen hechas entre las asociaciones del barrio que las pidan”.

Para Vaquero, la esencia de la cabalgata de barrio está precisamente en el proceso de decorar la carroza. Él recuerda que de niño participaba en la que organizaba el AMPA de su colegio. “Era una actividad extraescolar más”, señala. Recuerda con cariño ir al colegio por la tarde y hacer manualidades junto a sus compañeros que después servían para vestir el camión en el que iban a desfilar días más tarde. Este es el primer año que va a participar con su hija, pero no habrá carrozas para decorar. En la cabalgata de los vecinos, los Reyes Magos desfilarán en coches, la mayoría de pajes lo harán a pie y otros irán en bicicleta. Todo lo han organizado en un mes con un presupuesto de 3.500 euros que han conseguido gracias a las donaciones de los vecinos.

El Ayuntamiento de Madrid licita cada dos años el presupuesto para las cabalgatas de los barrios. Para 2023-2024 dio 255.000 euros a las asociaciones de Vicálvaro para que organizasen su propia cabalgata. Para este año y el que viene, el presupuesto ha aumentado hasta los 280.000 euros para el desfile que organiza la empresa privada contratada por el Consistorio. Las entidades del distrito han elaborado un comunicado conjunto para denunciar que, pese a aumentar el presupuesto, se reduce el número de carrozas: “No se entiende cómo en 2015 con un presupuesto de 50.000 euros se podían montar 12 camiones; en 2022 con un presupuesto de 255.000 euros se pudieron sumar 22 asociaciones; pero en 2024, con un presupuesto de 280.000 euros solo se dejan 8 carrozas para el barrio”.