¿Tu rostro está constantemente rojo? Señales de que puede ser rosácea, según dermatólogas

¿La piel de tu rostro está constantemente roja, la sientes seca y tienes picazón? Además de realizar tu rutina de skin care con los productos adecuados, y estar bien hidratado, podrías considerar acudir con un especialista para descartar algún padecimiento como la rosácea.

¿Qué es la rosácea?

La rosácea es una afección inflamatoria crónica que provoca enrojecimiento y sarpullido en la piel. De acuerdo con las especialistas Angélica María Cortázar y Venecia Landini, se trata de una respuesta inmunológica exacerbada a diversos estímulos.

La rosácea es causada por la inflamación y la vasodilatación, lo que hace que los vasos sanguíneos se hinchen debajo de la piel. Esto provoca uno de los síntomas más conocidos del padecimiento: el enrojecimiento facial constante, incluso sin exposición al sol.

Tipos de rosácea

Existen diferentes tipos de rosácea que pueden provocar diversos síntomas:

  • Rosácea eritematotelangiectásica: Provoca enrojecimiento facial persistente y vasos sanguíneos visibles.
  • Rosácea papulopustulosa: Se caracteriza por la aparición de granos y pústulas similares al acné.
  • Rosácea fimatosa: Engrosa la piel, especialmente en la nariz (rinofima).
  • Rosácea ocular: Afecta los ojos, causando inflamación, enrojecimiento y sequedad.

Síntomas de la rosácea

Además del enrojecimiento facial, la rosácea puede provocar otros síntomas como:

  • Sequedad
  • Comezón
  • Tirantez
  • Granos (pápulas y pústulas)

Es importante acudir a un dermatólogo si experimentas estos síntomas de manera persistente.

Causas y factores desencadenantes de la rosácea

La causa exacta de la rosácea aún se desconoce, pero se cree que está relacionada con la genética y la sensibilidad a ciertos factores externos, como:

  • Estrés
  • Cambios hormonales
  • Exposición al sol
  • Alimentos picantes
  • Bebidas alcohólicas
  • Productos cosméticos irritantes

Tratamiento de la rosácea

El tratamiento de la rosácea varía según el tipo y la gravedad del padecimiento. Las medidas generales incluyen:

  • Limpieza facial suave con un limpiador no irritante
  • Aplicación de protector solar de amplio espectro
  • Uso de cremas hidratantes no grasas
  • Evitación de factores desencadenantes

En casos más severos, pueden recetarse medicamentos tópicos u orales, o tratamientos como la electrocirugía o el láser CO2.

Prevención de la rosácea

Aunque la rosácea es una condición genética, es posible prevenirla o reducir su gravedad siguiendo estos consejos:

  • Proteger la piel del sol
  • Mantener una buena higiene facial
  • Evitar factores desencadenantes
  • Controlar el estrés

Recuerda que acudir a un dermatólogo regularmente es esencial para el diagnóstico y tratamiento adecuados de la rosácea.