Temporal Devastador en Santa Fe: Casilda y Otras Localidades en Estado de Emergencia

La provincia de Santa Fe está experimentando un momento crítico tras el paso de un fuerte temporal que ha dejado una estela de destrucción y desesperación. Casilda y varias localidades del centro sur de la provincia están lidiando con techos volados, árboles caídos y autos aplastados, mientras los equipos de emergencia están trabajando arduamente para brindar asistencia y restaurar los servicios básicos.

La Tormenta que Azotó Casilda

Según informa ámbito.com, la ciudad de Casilda ha sido una de las más afectadas por el temporal. Vientos huracanados, granizo y lluvias torrenciales han generado pánico entre los residentes, especialmente en la autopista a Rosario. El periodista Adrián Salonia, en un informe para C5N, describió la magnitud del granizo que cayó durante diez minutos ininterrumpidos, causando serios inconvenientes en la ciudad.

«Fue una tormenta muy fuerte, cayó mucha cantidad de agua y granizo», describió Salonia, destacando la magnitud de los daños causados. La situación ha llevado a que el sur de la provincia de Santa Fe se encuentre bajo alerta amarilla debido a la intensa actividad eléctrica, la acumulación de agua y las fuertes ráfagas de viento que podrían superar los 60 km/h, además de la posibilidad de nueva caída de granizo (ámbito.com, s.f.).

Testimonios de Desesperación y Resiliencia

Los testimonios de los residentes de Casilda pintan un panorama desgarrador. Betiana, una vecina de la localidad, relató el angustiante momento en que tuvo que refugiarse en un armario junto a su nieta después de que el viento arrancara el techo de su casa. «Pensaba que me llevaba con la nena, que me chupaba», recordó entre lágrimas. Ahora, su familia se enfrenta a la difícil tarea de comenzar de nuevo, sin techo y sin muchas de sus pertenencias.

Dos días después de la tormenta, la ciudad está empezando a recuperarse. El personal de la Secretaría de Salud municipal está llevando a cabo una campaña de profilaxis en los barrios más afectados, mientras que la EPE (Empresa Provincial de la Energía de Santa Fe) está trabajando para restaurar el suministro eléctrico en las zonas sin energía. La situación sigue siendo crítica, y las autoridades locales están enfocadas en brindar asistencia a los damnificados.

El Ejército se Suma a las Labores de Recuperación

El Ministerio de Defensa ha confirmado que un equipo del Ejército se unirá a las labores de limpieza y remoción de escombros. Un oficial y nueve suboficiales llegaron a la ciudad para ayudar en la remoción de árboles caídos, ramas y postes. El Gobierno también está enviando herramientas como motosierras y palas para acelerar las tareas de recuperación.

Refugio en el Club Aprendices

El club Aprendices se ha convertido en un centro de evacuados, donde unas 15 personas, incluidos adultos y niños, han encontrado refugio. A pesar de que el club también sufrió daños por la tormenta, ha abierto sus puertas para brindar alojamiento y apoyo a quienes perdieron sus hogares. Sin embargo, el club aún no ha recuperado la energía eléctrica, lo que ha complicado aún más la situación de los evacuados.

Mirta, junto a su hija y nieta, vivió un dramático momento durante la tormenta que destruyó su casa en el barrio Yapeyú. «Perdimos todo, nos quedamos con lo puesto», expresó, relatando cómo el techo de su hogar voló por completo y los muebles se arruinaron. Mirta solicitó ayuda a la comunidad para poder reconstruir lo perdido, especialmente en forma de ropa, chapas o muebles. Aquellos que deseen colaborar con ella y su familia pueden contactarla al teléfono 3464 - 527089.

Acciones de Asistencia y Recuperación en Marcha

En Casilda, los equipos de salud están realizando tareas de profilaxis en el barrio Nueva Roma "D", donde también se distribuyen mochilas de fumigación debido a casos positivos de dengue. La EPE, con la ayuda de 35 operarios, ha repuesto el 85% del servicio de energía eléctrica, y gran parte de la ciudad ya cuenta con alumbrado público. El servicio de agua potable también se restableció en toda la localidad, aunque Aguas Santafesinas sigue enviando bidones a sectores específicos.

En Pujato, el servicio de electricidad ya está completamente restaurado, excepto por algunos problemas puntuales en viviendas individuales, los cuales siguen siendo atendidos. Los Bomberos Voluntarios y la EPE continúan trabajando en la remoción de árboles y postes caídos, y la transitabilidad ya ha sido restablecida tanto para vehículos como peatones.

En Funes, la seguridad se ha reforzado tras el colapso de la estructura de monitoreo de la sala de Comando, y el Gobierno provincial, a través del Ministerio de Igualdad y Desarrollo Social, está asistiendo a las familias afectadas. El 85% de la ciudad ya tiene servicio eléctrico, y se sigue trabajando para restaurar el suministro en las zonas restantes. Además, el monitoreo del Sistema de Alerta Temprana (SAT) sigue en funcionamiento para prever nuevos fenómenos meteorológicos.

La provincia de Santa Fe está demostrando su resiliencia ante la adversidad. A pesar de los daños y la desesperación, la comunidad se está uniendo para brindar apoyo a los damnificados y reconstruir lo perdido. La asistencia del gobierno, el trabajo de los equipos de emergencia y la solidaridad de los ciudadanos están siendo fundamentales para superar este difícil momento.