Un potente terremoto de magnitud 6.9 sacudió el norte de Papúa Nueva Guinea en la mañana del domingo, según confirmó el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS). El Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico declaró que no había amenaza de tsunami a raíz del sismo terrestre, el cual ocurrió a una profundidad de alrededor de 35 kilómetros.
¿Dónde y cuándo se sintió el terremoto?
El temblor notable golpeó aproximadamente a 88 kilómetros al suroeste de Wewak, una localidad de 25,000 habitantes que actúa como capital de la provincia de East Sepik en Papúa Nueva Guinea. A pesar de ser una región donde los terremotos son comunes debido a su posición sobre el cinturón de fuego del Pacífico, una zona de intensa actividad tectónica, no se informaron de inmediato daños o lesiones.
Los peligros de un terremoto en una zona tan remota
Si bien estos eventos geológicos rara vez causan daños generalizados en las tierras altas de la jungla, que están escasamente pobladas, sí tienen el potencial de desencadenar deslizamientos de tierra destructivos. En abril del año anterior, al menos siete personas murieron cuando un terremoto de magnitud 7.0 golpeó una zona selvática del interior del país.
La representación gráfica de la sismicidad en esta región destaca la complejidad de su tectónica, habiendo sido objeto de análisis y comentarios por expertos internacionales. La mayoría de los nueve millones de ciudadanos del país viven fuera de las principales ciudades y pueblos, y es precisamente la geografía desafiante junto con la falta de carreteras asfaltadas lo que puede dificultar gravemente los esfuerzos de búsqueda y rescate tras un terremoto.
¿Existen amenazas de aftershocks?
Los expertos advierten de la posibilidad de réplicas fuertes, dados los patrones de actividad registrados en esta región. Se produjeron tres terremotos de diversas magnitudes en un período de dos horas, siendo el evento más fuerte el que se registró a una magnitud de 7.0, seguido por otro de magnitud 6.9.
Aunque no se ha emitido ninguna alerta de tsunami ni se ha requerido ninguna acción inmediata, las autoridades instan a los residentes a estar preparados y conscientes de las posibles réplicas que pueden seguir a un terremoto de tal magnitud.
Medidas de precaución y asesoramiento a la población
Se aconseja a la población estar alerta y seguir las instrucciones de las autoridades locales y expertos en sismología. Mientras tanto, agencias internacionales monitorean la situación y proporcionan actualizaciones sobre cualquier cambio en la data sísmica o posibles impactos después del temblor inicial.