Tres bebés recién nacidos han muerto congelados en Gaza debido a las bajas temperaturas, según ha confirmado el médico jefe de pediatría de un hospital del sur de la Franja. El territorio palestino, asolado por la guerra, se enfrenta a un duro invierno con temperaturas que descienden hasta los 8 grados centígrados por la noche.

Bebés desplazados y sin protección

Los bebés fallecidos vivían con sus familias en tiendas de campaña, sin forma de protegerse del frío. Las tiendas no ofrecen ningún aislamiento y las noches son muy frías, lo que ha provocado la muerte de estos pequeños.

Las familias de los bebés han declarado que estos se despertaron varias veces durante la noche para ser amamantados, pero que por la mañana los encontraron muertos. Los médicos han confirmado que las muertes se han debido a una grave bajada de temperatura.

Situación crítica en Gaza

La muerte de estos bebés es un nuevo drama que se suma a la difícil situación que se vive en Gaza. La guerra ha desplazado a más de 2,4 millones de personas, muchas de las cuales viven en campamentos improvisados en condiciones precarias.

«Las tiendas no protegen del frío, y por la noche hace mucho frío, sin forma de calentarse», ha declarado el médico jefe de pediatría.

Además, muchas madres sufren desnutrición, lo que afecta a la calidad de la leche con la que alimentan a sus bebés. Esto hace que los recién nacidos sean especialmente vulnerables al frío.

Llamamiento a la ayuda internacional

Las organizaciones humanitarias han hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que proporcione ayuda urgente a Gaza. Se necesita alimentos, medicinas y refugio para los desplazados, así como apoyo psicológico para las familias que han perdido a sus seres queridos.

La situación en Gaza es cada vez más crítica y se necesita ayuda internacional para evitar más tragedias como la muerte de estos tres bebés.