Trump quiere cambiar el nombre del Golfo de México a Golfo de América

El presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció su intención de renombrar el Golfo de México ante los problemas migratorios recientes. Además, la congresista republicana, Marjorie Taylor Greene, aseguró que presentará un proyecto de ley lo más pronto posible para hacer oficial el cambio de nombre.

«Nosotros hacemos la mayor parte del trabajo, así que cambiaremos el nombre de Golfo de México al Golfo de América, el cual es un nombre hermoso y muy apropiado. Además México debe parar a las miles de personas que entran en nuestro territorio». Donald Trump, presidente electo de los Estados Unidos

Esta declaración ha generado reacciones negativas por parte de las autoridades mexicanas. El presidente de la Mesa Directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña, calificó como “inaceptable” las declaraciones de Trump y aclaró que las “reglas son muy claras y 20 kilómetros hacia adentro es mar patrimonial”.

Por su parte, el coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal, aclaró a Donald Trump que el nombre Golfo de México "es una marca histórica registrada mucho antes del nacimiento de Estados Unidos".

Antecedentes

El Golfo de México es un mar marginal del océano Atlántico, ubicado entre América del Norte y América Central. Tiene una superficie de aproximadamente 1.6 millones de kilómetros cuadrados y sus costas están compartidas por México, Estados Unidos y Cuba.

El nombre "Golfo de México" fue utilizado por primera vez por el explorador español Alonso de Ojeda en 1503. Desde entonces, ha sido el nombre comúnmente utilizado para referirse a este cuerpo de agua.

Implicaciones

El cambio de nombre del Golfo de México a Golfo de América tendría varias implicaciones. En primer lugar, afectaría la identidad nacional de México, ya que el Golfo de México es un importante símbolo de la historia y la cultura de México.

En segundo lugar, podría crear confusión y problemas legales, ya que el Golfo de México es el nombre oficial utilizado en los tratados internacionales y los mapas marítimos.

En tercer lugar, podría dañar la relación entre México y Estados Unidos, ya que el cambio de nombre sería visto como un acto de agresión por parte de México.

Conclusión

La propuesta de Donald Trump de cambiar el nombre del Golfo de México a Golfo de América es inaceptable y arbitraria. Esta propuesta no tiene ningún fundamento legal o histórico y solo serviría para crear confusión y dañar las relaciones entre México y Estados Unidos.