La DANA y sus Secuelas: Cinco Meses de Aislamiento en Valencia
En la Comunidad Valenciana, la vida de numerosos residentes está cambiando drásticamente tras el devastador paso de la DANA en octubre. Según reporta Ferran Bono (2025) de El País, muchas personas se encuentran atrapadas en sus hogares debido a la prolongada avería de los ascensores. Este problema, que afecta principalmente a personas mayores, con movilidad reducida o con discapacidad, está generando una crisis de accesibilidad y bienestar en la región.

Nicolás y la Rutina Interrumpida
Nicolás García Costa, un joven de 21 años con síndrome del espectro autista, es uno de los afectados. Según El País (Bono, 2025), Nicolás necesita una rutina estricta para vivir, y la avería del ascensor ha trastornado su vida por completo. «A Nico le da miedo ver el foso del ascensor que está ahí abajo, con la puerta medio abierta, y salir a la escalera», explica su padre, Sebastián García. «Es increíble cómo un ascensor te puede cambiar la vida, y a mi hijo mucho más.»
El Impacto en la Comunidad
La situación de Nicolás es un reflejo de la realidad que viven muchos otros vecinos. La falta de ascensor no solo dificulta la movilidad, sino que también genera aislamiento social y problemas de salud mental. Cristina Duque, psicóloga que trabaja en la zona DANA con Concemfe, señala que «el aislamiento físico implica aislamiento social, que es uno de los principales riesgos para la salud mental. Las relaciones sociales son una necesidad. Y en el caso de las personas con discapacidad, que son doblemente vulnerables, la falta de ascensor es una dificultad más» (Bono, 2025).

La Magnitud del Problema
El vicepresidente valenciano para la reconstrucción tras la DANA, Francisco José Gan Pampols, estima que cerca de 6,000 de los 10,000 ascensores afectados siguen estropeados, con un coste de reparación que podría ascender a 160 millones de euros (Bono, 2025). Emilio Carbonell, presidente de Ascencoval, reduce esta estimación a un máximo de 3,000 elevadores, pero reconoce la complejidad y diversidad del problema.
Respuestas y Desafíos
La Consejería de Servicios Sociales, en coordinación con diversas entidades, ha identificado 311 edificios con personas de movilidad reducida, proporcionándoles atención diversa. Sin embargo, no existe una estimación precisa del total de personas afectadas. Aunque se ofrece la posibilidad de realojo, la mayoría prefiere permanecer en sus hogares a la espera de la reparación de los ascensores.
Historias Personales de Resiliencia
María Solaz, de 58 años, padece esclerosis múltiple y vive en un cuarto piso con dos ascensores averiados. A pesar de las dificultades, ha comenzado a salir a la calle con la ayuda de la Cruz Roja para recibir el sol y visitar el mercado. Por otro lado, Manuel Ramón, un cocinero jubilado de 90 años, lleva cinco meses sin poder reunirse con sus amigos debido a la falta de ascensor. «Lo echo mucho de menos», comenta (Bono, 2025).
¿Qué se está Haciendo?
La comunidad de vecinos del edificio de Nicolás ha recibido 24,000 euros del Consorcio de Seguros, pero el arreglo del ascensor costará entre 33,000 y 43,000 euros, y tardará al menos cinco meses. Sebastián, el padre de Nicolás, cuestiona por qué la reparación de los ascensores no se considera una emergencia prioritaria. La Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Concemfe) también solicita ayudas específicas para la reparación y sustitución de ascensores, priorizando a las personas más vulnerables.
El Futuro Incierto
Mientras tanto, la vida continúa con desafíos diarios. Teresa camina con un andador hasta el supermercado, luchando contra las dificultades para subir las escaleras. La falta de ascensores no solo afecta la movilidad, sino que también impacta la salud mental y el bienestar social de los afectados. La pronta solución de este problema es crucial para restaurar la normalidad y mejorar la calidad de vida de estas personas.
- Impacto Social: Aislamiento, problemas de salud mental.
- Desafíos Económicos: Costos de reparación elevados, necesidad de ayudas.
- Demandas Urgentes: Priorización de la reparación de ascensores, apoyo a personas vulnerables.
La situación en Valencia sigue siendo crítica para muchos, y la necesidad de una respuesta rápida y efectiva es más apremiante que nunca.