Un toro de lidia y su insólita pasión por la paella
Con la presencia de un toro bravo disfrutando de una paella junto a un grupo de amigos, las redes sociales se han visto revolucionadas en los últimos días. El protagonista de este insólito vídeo es Tamarit, un toro de 300 kilos de peso, hijo de la ganadería del torero madrileño José Ramón García 'Chechu'. Esta curiosa situación es el resultado de una relación especial entre el animal y su criador, quien se hizo cargo de Tamarit tras ser rechazado por su madre al nacer. Esta convivencia, que comenzó con la crianza a biberón, ha desembocado en un vínculo fuerte que permite a Tamarit moverse con soltura en el interior de la casa, llegando a disfrutar de la paella en el salón.
¿Cómo comenzó este vínculo entre un toro bravo y su criador?
'Chechu' destaca que el tiempo que pasaron juntos durante esos primeros meses fue clave para establecer esa conexión que ahora se traduce en situaciones que superan las imágenes convencionales de los toros bravos. A pesar de haber entablado peleas con otros toros y haber mostrado comportamientos propios de su especie, Tamarit relaja su porte cuando se halla cerca de 'Chechu' y su hogar, que ha llegado a considerar su propio hábitat.
Un futuro reproductivo para Tamarit y el legado de su singular crianza
La intención de 'Chechu' es probar la bravura de Tamarit como semental, aunque tiene claro que la res siempre formará parte de su hogar y vivirá sus días en la tranquilidad de su entorno familiar. La peculiaridad de esta relación recuerda a la amistad legendaria entre Antonio Chenel 'Antoñete' y su toro Romerito, demostrando una vez más el potencial de las conexiones interespecies. Tamarit ya se ha hecho un lugar no solo en el hogar de 'Chechu', sino también en el de aquellos que han quedado fascinados al contemplar su historia en las redes sociales, un lugar donde, como dice otro de los videos, 'todo lo inimaginable puede ocurrir'.