El Gobierno y los banqueros se reunirán la próxima semana para definir acuerdo final sobre inversiones forzosas
El presidente de la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia (Asobancaria), Jonathan Malagón, anunció este martes que el Gobierno y los banqueros se reunirán la próxima semana para definir las condiciones del acuerdo que están trabajando y que busca descartar una iniciativa que obligue a la banca colombiana a realizar inversiones forzosas.
Los detalles del acuerdo
Malagón indicó que en la reunión se evaluarán los mecanismos de financiamiento para el plan de recuperación económica y se analizarán las alternativas que han surgido en las últimas conversaciones entre ambas partes.
El objetivo es llegar a un acuerdo que permita impulsar la reactivación económica sin necesidad de recurrir a medidas obligatorias para la banca.
Según trascendió de las reuniones previas, la banca está dispuesta a colocar hasta 155 billones de pesos en crédito para atender los requerimientos de los sectores productivos identificados por el Ejecutivo, como la agricultura, la vivienda, la industria, el turismo y la economía popular.
Sin embargo, Malagón aclaró que ese monto aún no está definido y que dependerá de la demanda del sector productivo y de los instrumentos que se utilicen.
El contexto de las negociaciones
El presidente Gustavo Petro ha manifestado su intención de obligar a la banca a realizar inversiones forzosas para redirigir el crédito hacia sectores que considera claves para la reactivación económica.
Esta propuesta ha generado preocupación en el sector bancario, que argumenta que podría desestabilizar el sistema financiero y frenar el crecimiento económico.
Ante esta situación, el Gobierno y los banqueros han iniciado una serie de negociaciones para buscar una solución consensuada.
La expectativa del acuerdo
Se espera que el acuerdo que se alcance la próxima semana permita generar certidumbre y confianza en el sector financiero y en la economía en general.
Además, se espera que el acuerdo contribuya a mejorar el acceso al crédito para los sectores productivos, lo que impulsaría el crecimiento económico y la generación de empleo.