La Empresa de Acueductos y Alcantarillados de Bogotá (EAAB) está cumpliendo 136 años de existencia y tal vez no había enfrentado tantos desafíos como los que ahora plantean el cambio climático y el racionamiento de casi tres meses por los bajos niveles de los embalses que abastecen a Bogotá y a 12 municipios de la Sabana.
A toda esta coyuntura pareciera sumarse una reducción de las lluvias en la última semana, lo que llevó a que los niveles de los reservorios, en especial del sistema Chingaza, se quedaran sobre el 42 por ciento. Solo hasta ayer mejoró un poco y el Acueducto confía en que sea una situación coyuntural.
¿Cómo abastece Bogotá su demanda de agua?
En entrevista con EL TIEMPO, Natasha Avendaño, gerente de la EAAB y quien está completando 6 meses al frente de la principal empresa del Distrito, respondió sobre la nueva situación del clima, de la necesidad de tener fuentes de agua, de qué va a pasar con el proyecto de la Ptar Canoas que completa 2 años estancado.
“Si seguimos con presiones climatológicas en el sistema Chingaza, tendríamos 70 por ciento de posibilidad de Tibitoc (río Bogotá) y el restante de Wiesner (la planta que trata el agua de Chingaza)”, señaló Avendaño.
Actualmente, Bogotá está abasteciéndose con el 50 por ciento del agua proveniente de Tibitoc, la planta de tratamiento de agua del río Bogotá. Antes era 24 o 26 por ciento. A partir del 1 de julio se entró con un metro cúbico adicional, es decir, se va reduciendo la presión sobre el sistema Chingaza.
Lo ideal, por la calidad del agua, por las condiciones de tratamiento, es contar con el agua de Chingaza, sin embargo, no se puede dejar desabastecida a la ciudad.
“Estamos haciendo un permanente monitoreo de las lluvias, que en las primeras tres semanas de junio nos permitieron un nivel que superaba estas curvas guías de crecimiento, pero los últimos días han estado bastante secos arriba. No importa que diluvie en Bogotá, si arriba no cae una gota de agua. En Chingaza ha llovido muy poco, casi que cerca de cero afluencias, pero esperamos que sea una situación coyuntural”, explicó Avendaño.
Todavía no se está para preocuparse, para decir que toca volver al esquema anterior. Se confía en que históricamente las lluvias son intensas en julio y agosto y que así va a ser este año.
¿Qué cambios se implementarán para mitigar la crisis?
La EAAB está optimizando la planta para llegar a tener en su tope máximo de 12 metros cúbicos por segundo y un caudal promedio de 10,5 metros cúbicos por segundo.
Además, están haciendo los estudios para solicitar el aumento definitivo del caudal concesionado por parte de la CAR. Ya hicieron solicitudes de aumentos temporales, que son los que están utilizando, para poder llegar a 8,3 metros cúbicos por segundo, pero la idea es que cuando esté optimizada la planta, a finales de este año o principios del próximo, se pueda tener ese caudal de 10,5 metros cúbicos siempre, lo que permitiría invertir los porcentajes de participación.
“El costo es el menor de los problemas, porque cualquier proyecto de embalse o de capacidad mayor de abastecimiento requiere un costo y unas inversiones que son reconocidas en los esquemas tarifarios. Tenemos que garantizar el abastecimiento, esa es la realidad”, afirmó Avendaño.
¿Qué pasará con el Embalse la Playa?
El embalse La Playa es una alternativa a largo plazo que se viene contemplando desde los años 60. Se trata de la construcción de un embalse en el páramo de Chingaza que permitiría aumentar la capacidad de almacenamiento de agua y garantizar el abastecimiento de Bogotá.
Sin embargo, el proyecto ha estado estancado durante años debido a preocupaciones ambientales. Avendaño ha señalado que se está avanzando en los estudios para solicitar la licencia ambiental y que se espera que se pueda tomar una decisión pronto.
¿Cómo avanza la construcción de la PTAR Canoas?
La PTAR Canoas es un proyecto de saneamiento de aguas residuales que se está construyendo en el municipio de Soacha. El proyecto permitirá tratar las aguas residuales de Bogotá y 12 municipios vecinos, reduciendo la contaminación del río Bogotá.
La construcción de la PTAR Canoas se ha retrasado debido a problemas legales, pero Avendaño ha señalado que se está avanzando en la resolución de estos problemas y que se espera que el proyecto pueda estar operativo en el 2025.
Cuando la PTAR Canoas esté operativa, se espera que mejore la calidad del agua del río Bogotá y que se reduzcan los problemas de contaminación y malos olores que afectan a los municipios ribereños.
La EAAB también está trabajando en otros proyectos para mejorar el abastecimiento de agua y el saneamiento de aguas residuales en Bogotá. Entre estos proyectos se encuentran la construcción de nuevos tanques de almacenamiento, la rehabilitación de redes de distribución y la implementación de programas de ahorro de agua.