**Gobierno y Segunda Marquetalia instalan mesa de negociación para impulsar la paz en Colombia**
Este lunes se dio inicio正式地a la mesa de negociación entre el Gobierno colombiano y la Segunda Marquetalia, un grupo disidente de las FARC que se había rear mado en 2019. El acto, que se llevó a cabo en Caracas, Venezuela, estuvo liderado por el comisionado para la paz, Otty Patiño, y por Luciano Marín Arango, alias "Iván Márquez", máximo líder de la Segunda Marquetalia.
Durante la instalación de la mesa, se acordó que durante el primer ciclo de negociación se trabajará en la agenda de diálogo, los protocolos de la negociación y en acciones para el desescalamiento del conflicto. Además, se confirmó que Cuba, Noruega y Venezuela serán los países garantes, mientras que la Conferencia Episcopal y una delegación de las Naciones Unidas serán los acompañantes del proceso.
**El desescalamiento del conflicto, el primer paso para la paz**
A diferencia de otros procesos de negociación, en los que se acordaron ceses del fuego en las primeras etapas de los diálogos, el Gobierno y la Segunda Marquetalia han optado por recurrir a lo que denominaron "el desescalamiento". Esta estrategia se plantea inicialmente en los departamentos de Nariño, Putumayo y Caquetá, donde la Segunda Marquetalia tiene mayor presencia."Creemos que el planteamiento que se ha hecho junto con la Segunda Marquetalia es una gran innovación. Desescalar el conflicto es una metodología nueva y creemos que será más alentadora y productiva que los ceses del fuego bilaterales", señaló Otty Patiño.
Iván Márquez también mencionó este desescalamiento, pero también habló de un "alistamiento territorial" sobre el cual no hubo claridad. "El 'alistamiento territorial' es condición necesaria e indispensable para los 'Territorios de paz', los cuales representan uno de los pilares del proceso con la Segunda Marquetalia", señaló el jefe guerrillero.
**Los retos jurídicos de la negociación**
El proceso de negociación con la Segunda Marquetalia plantea importantes retos jurídicos, ya que se trata de un grupo que no participó en el Acuerdo de Paz de 2016. El artículo Transitorio 66 de la Constitución, en su parágrafo 2, indica que "en ningún caso se podrán aplicar instrumentos de justicia transicional a grupos armados al margen de la ley que no hayan sido parte en el conflicto armado interno, ni a cualquier miembro de un grupo armado que una vez desmovilizado siga delinquiendo".
Además, la base jurídica de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), es decir, la Ley 1957 de 2019, dice que aquellos que firmaron los compromisos derivados de la negociación de La Habana y luego desertaron no podrán recibir ningún beneficio del acuerdo.
El Gobierno ha dejado claro que no tiene intención de renegociar el Acuerdo de Paz de 2016, pero sí está dispuesto a escuchar las propuestas de la Segunda Marquetalia.
**La sociedad civil, clave en el proceso de paz**
La participación de la sociedad civil es fundamental para el éxito de este proceso de negociación. La Segunda Marquetalia ha dicho que está interesada en escuchar las propuestas de las comunidades y en trabajar conjuntamente para construir la paz.
"La 'Segunda Marquetalia' asume el compromiso con los familiares de las víctimas del conflicto. Responderemos por los hechos ocurridos después del 2019", concluyó Mendoza.
El proceso de negociación con la Segunda Marquetalia es un paso importante para avanzar hacia la paz en Colombia. Sin embargo, es importante ser realistas y reconocer que el camino será largo y difícil. La voluntad política de ambas partes y el apoyo de la sociedad civil serán cruciales para lograr un acuerdo que ponga fin al conflicto armado en el país.
