Juan Pablo Aristizábal: Trabajando por la educación desde la Fundación Morat

Juan Pablo Aristizábal, un joven abogado graduado con honores de la Universidad de los Andes, dedica su vida a mejorar el nivel de lectura de cientos de niños en Risaralda y Bogotá.

A través de la Fundación Aprender a Quererte, Aristizábal y su equipo trabajan incansablemente para brindar apoyo educativo a niños y jóvenes de escasos recursos.

Educación transformadora

El proyecto de la fundación se centra en la promoción de la lectura como una herramienta fundamental para el desarrollo personal y académico. Creen firmemente que la educación tiene el poder de transformar vidas y romper ciclos de pobreza.

  • A través de sus programas, la fundación proporciona acceso a libros, organiza talleres de lectura y ofrece tutorías personalizadas.
  • Su objetivo es fomentar el amor por la lectura y desarrollar habilidades de comprensión y lenguaje.

Impacto significativo

El trabajo de la fundación ha tenido un impacto significativo en la comunidad. Han visto mejoras notables en los niveles de lectura y comprensión de los niños participantes.

Además, la fundación ha creado espacios seguros e inclusivos donde los niños pueden aprender, crecer y desarrollar su potencial académico.

Expansión y reconocimiento

Debido al éxito de su programa en Risaralda, la fundación ha comenzado a expandir sus operaciones a Bogotá. También han establecido alianzas con escuelas y organizaciones locales para ampliar su alcance.

El trabajo de Juan Pablo Aristizábal y la Fundación Aprender a Quererte ha sido reconocido por su impacto social. Han recibido varios premios y reconocimientos por su dedicación a mejorar la educación de los niños.

Llamado a la acción

Aristizábal hace un llamado a la comunidad para apoyar los esfuerzos de la fundación. Señala que cada niño merece tener acceso a una educación de calidad y que la lectura es un pilar fundamental para su futuro.

La Fundación Aprender a Quererte es un testimonio del poder transformador de la educación. Su trabajo inspirador continúa marcando una diferencia en la vida de innumerables niños en Colombia.