El presidente Gustavo Petro insiste en que el proyecto de autonomía fiscal ampliaría la desigualdad regional en Colombia. Tras la radicación de más de 3 millones de firmas ante la Registraduría Nacional del Estado Civil por parte de los promotores del referendo constitucional que busca la autonomía fiscal para las regiones, el mandatario reiteró su oposición a la iniciativa.
Petro: La autonomía fiscal aumentaría la desigualdad
A través de un mensaje en redes sociales, Petro afirmó que esta reforma constitucional ampliaría la desigualdad regional, ya que ciudades como Bogotá y Medellín concentran la mayor parte del impuesto de renta.
"Hay que advertir que si los departamentos pudieran administrar sus impuestos de renta y patrimonio, solo dos territorios tendrían finanzas públicas: Bogotá y Medellín. Allí es donde sale la mayor parte del impuesto de renta”, comentó Petro.
El jefe de Estado señaló que muchos departamentos no tendrían recursos para financiar a la Fuerza Pública.
"Tendríamos básicamente un ejército y una policía solo en Medellín y Bogotá, el resto de departamentos no tendrían como financiar su propia Fuerza Pública”, aseveró.
Petro también aseguró que al aumentar la desigualdad regional aumentaría la violencia.
“Bogotanos y la gente del Poblado se darían cuenta que el centralismo extremo que proponen en un mar de violencia, no serviría para nada”, dijo.
La iniciativa nació por una idea del gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, y es apoyada por el exministro de Justicia Wilson Ruiz, el concejal de Bogotá Juan Daniel Oviedo, el exgobernador del Meta Juan Guillermo Zuluaga, la exsenadora María del Rosario Guerra, entre otros.
Requisitos para aprobar el referendo
La Registraduría deberá certificar que el 5 por ciento del censo electoral respaldó la iniciativa. Es decir, de los 3'500.000 firmas entregadas a la Registraduría, 2'027.199 deben ser válidas.
Si este procedimiento no tiene ningún problema, el Congreso deberá tramitar una ley que posteriormente será revisada por la Corte Constitucional.
Si esos requisitos cumplen con lo establecido por la ley, el Presidente deberá convocar al referendo y los colombianos saldrán a las urnas y decidirán si modifican o no la Constitución.
Es un trámite que puede tardar hasta dos años, por lo que no se cruzaría con las elecciones presidenciales y legislativas del 2026.
El presidente Petro agregó que este proyecto derogaría la reforma al Sistema General de Participaciones (SGP) que aprobó el Congreso hace unas semanas, pues son dos propuestas totalmente diferentes.
Dicha reforma aumentará las transferencias del presupuesto a los departamentos, pasa del 23 al 39 por ciento mientras que el referendo busca que tributos específicos se queden en los departamentos.