ACS descarta salidas a Bolsa o fusiones, pero mantiene la puerta abierta

El presidente de ACS, Florentino Pérez, ha descartado ante la junta de accionistas operaciones corporativas como salidas a Bolsa o fusiones con otros grandes grupos de infraestructuras. "Este tipo de cosas no están contempladas", ha señalado Pérez. Sin embargo, ha dejado la puerta abierta a estas operaciones en el futuro: "Cuando lo contemplemos, lo traeremos a la junta".

El consejero delegado de ACS, Juan Santamaría, ha reconocido que hay inversores institucionales que sugieren al grupo las ventajas de realizar una doble cotización en España y en Estados Unidos. Pese a ello, Santamaría ha insistido en que "no hay nada sobre la mesa", ni a través de una cotización de la constructora Turner, filial de ACS, ni con acciones del propio grupo.

ACS ha presentado ante la junta de accionistas un plan estratégico 2024-2026 que contempla unos ingresos de entre 43.000 y 48.000 millones de euros, un beneficio neto de 1.000 millones y una generación de caja operativa de entre 3.300 y 4.000 millones de euros.

El plan incluye la distribución de dividendos por 2.000 millones de euros en el periodo 2024-2026, con una media de 670 millones anuales. Para financiar este plan, ACS ha aprobado un aumento de capital por un máximo de 634 millones de euros.

Apuesta por la transición energética y la movilidad sostenible

El grupo ACS ha puesto de manifiesto su apuesta por la transición energética y la movilidad sostenible. El grupo está invirtiendo en el desarrollo de infraestructuras de alto valor añadido para sectores como el de la automoción, las energías renovables, la minería, la biofarmacia y las tecnologías de la información.

ACS cuenta con una cartera de actividad de 73.500 millones de euros y fuertes expectativas de negocio en dos de sus mercados principales, Estados Unidos y Australia.

La autopista SH-288, un activo "exitoso"

En relación con la autopista SH-288 en Texas, Estados Unidos, uno de los activos estrella de ACS, el consejero delegado Juan Santamaría ha explicado que el Estado de Texas tiene reconocido por contrato el derecho a finalizar la concesión. Sin embargo, el departamento de Transportes negocia en estos momentos con la concesionaria si efectivamente recupera la gestión de la autopista o mantiene a Abertis, filial de ACS, al frente de la gestión "bajo un nuevo acuerdo".